A la venta desde la primavera de 2019, el Volkswagen T-Cross es un pequeño SUV de 4,11 metros fabricado en la planta de Landaben (Navarra) sobre la base del Polo, del que deriva directamente. Tiene 12 centímetros menos que el T-Roc, y también está por debajo del Volkswagen Taigo (4,26 metros), que se fabrica en estas mismas instalaciones, con una silueta más deportiva. La unidad de esta prueba, con motor 1.5 TSI de 150 CV, es la más potente de la gama, con tracción delantera, transmisión automática DSG7 y acabado Sport. El precio, con descuentos promocionales, es de 26.215 euros.
El T-Cross que hemos probado pertenece a un segmento muy poblado y en constante crecimiento, el B-SUV, categoría en la que tiene competidores con precios muy desiguales (más bajos y más altos). Y destaca por cualidades sobresalientes, como sus altas prestaciones, un consumo razonable, interior espacioso para su tamaño y abundante tecnología tanto de serie como en opción, según nuestras impresiones. La mayoría de sus rivales compiten también con su inmediato hermano mayor, el T-Roc, que responde al mismo concepto, tiene versiones 4x4 y cotas ligeramente más altas.
Entre los principales competidores de este T-Cross figuran, en primer lugar, el SEAT Arona FR 1.5 TSI DSG7 de 150 CV (con descuento 27.580€) con el que comparte plataforma y muchos elementos. Le siguen, el Ford Puma Titanium 1.0 EcoBoost MHEV automático de 155 CV (con desc.24.015€); el Renault Captur Zen automático EDC Micro Híbrido de 140 CV (con desc. 24.615€); el Citroën C3 Aircross Shine PureTech 130 CV Aut. EAT6 (22.700€); y el Opel Mokka Ultimate 1.2 Turbo AT8 de 130 CV (sin desc. 31.950€), entre otros.
Desconexión de dos cilindros con poco esfuerzo
El motor de esta unidad es el exitoso 1.5 TSI de 150 CV, que incorporan muchos modelos del consorcio Volkswagen, que para la gama 2021 se ha revisado para cumplir con la normativa de emisiones vigente. No tiene hibridación ligera para reducir consumo, ni utiliza otro carburante menos costoso. Los únicos aportes a la eficiencia son: el sistema de desconexión de dos cilindros cuando no se le exige mayor potencia (sobre todo cuando se conduce a vela) y el dispositivo Stop&Start de parada y arranque automático en semáforos y retenciones. Ambos cumplen adecuadamente su cometido y hacen a este coche algo más ahorrador de gasolina.
El registro homologado de consumo con el citado motor es de 5,9 litros por cada 100 km, y en esta prueba, con sentido de ahorro, no hemos gastado mucho más. En parte gracias a la desconexión automática de dos cilindros cuando se mantiene el pedal a medio gas. En nuestro recorrido habitual, por autovía llana, dos ocupantes y bultos pequeños, la media fue de 6,3 litros/100 km, por lo que en un desplazamiento más largo, la autonomía pudo ser de unos 625 km. En ciudad, el consumo rondó los 7 litros, y en carreteras ascendentes o aceleraciones fuertes, más de 8 litros.
Igual de cómodo que un turismo
El comportamiento dinámico es otro buen argumento de este T-Cross. Las suspensiones son confortables y equilibradas. Se conduce a gusto en todo tipo de firmes, tanto en asfalto en buen estado como en pistas de tierra no muy accidentadas. Absorbe bien los baches y las irregularidades del pavimento. Las reacciones son como de un turismo. Aunque no invita a trazar las curvas a mucha velocidad, pero su estabilidad es incuestionable. Además siempre con la vigilancia de sus sistemas activos, porque hemos comprobado que actúan ante la mínima pérdida de tracción y ayudan a mantener la trayectoria ordenada del vehículo. La dirección también colabora a esta buena dinámica, es rápida y precisa.
El interior es amplio y confortable para transportar a cuatro adultos. Las cotas de altura, anchura y longitudinales son más grandes que las de modelos competidores. Las plazas traseras pueden tener un espacio para las piernas muy holgado, ya que la banqueta trasera se puede desplazar longitudinalmente hasta 15 centímetros, mientras que el volumen del maletero varía de un mínimo de 385 hasta 455 litros. El C3 Aircross y el Renault Captur tienen mayor volumen de carga, porque también disponen de banquetas traseras correderas, pero las longitudes de ambos son 5 y 11 cm superiores, respectivamente.
Habitáculo cómodo y de aspecto agradable
El puesto de conducción es alto y ergonómico. El salpicadero y el entorno de mando en general tienen buena apariencia, aunque sus plásticos de revestimiento son algo duros y dejan huecos. No obstante se percibe buen ajuste y no originan el mínimo ruido cuando se circula por carreteras en mal estado. La visibilidad es buena desde todos los asientos, emplazados desde una posición alta, éstos son de mullido cómodo y de base larga. En las plazas traseras pueden acomodarse dos adultos de 1,85 sin problemas, pero tres no, por lo de siempre que tienen la mayoría de modelos del mercado, asiento central muy estrecho y con mullido duro.
El equipamiento de serie es bastante completo, sobre todo los dispositivos de seguridad protección de ocupantes, pero también tiene disponible un buen número de elementos opcionales, a pesar de su acabado tope de gama. Sin sobreprecio destaca la alerta de cambio involuntario de carril y de mantenimiento en el mismo, asistente de distancia con el vehículo que va delante (Front Asssist), asistente de salida de aparcamiento, control de presión de neumáticos, detector de fatiga del conductor, iluminación Full LED (con luces automáticas de carretera), frenado de emergencia en ciudad, levas para el cambio de marchas detrás del volante, luz intensa de frenada de emergencia, climatizador ‘Climatronic’ bizona, lunas tintadas, conexión Bluetooth para móviles y regenerador de energía en frenadas, entre otros.
Excesivos elementos en opción
Entre los equipos opcionales que se pueden adquirir en paquetes figuran entre los más importantes: llantas de aleación de 18 pulgadas, rueda de repuesto, navegador Discovery Media, Sonido Beats, eyectores delanteros térmicos automáticos, lunas traseras oscurecidas, asientos delanteros con calefacción, acceso sin llave, cámara de visión trasera, aparcamiento automático (Park Assist), asistente de ángulo muerto, indicador de nivel de líquidos, lunas oscurecidas traseras laterales y trasera, pedales de acero fino, volante deportivo multifunción forrado en cuero, dispositivo de remolque desmontable y carga por inducción de móviles, entre otros.
DATOS TÉCNICOS
Motor.- Combustible: gasolina. Cilindros: 4, en línea. Cilindrada: 1.498 c.c. Válvulas: 4 por cada cilindro (16v). Potencia máxima: 150 CV (110 kW) entre 5.000 y 6.000 rpm. Par máximo: 250 Nm entre 1.500 y 3.500 rpm. Alimentación: inyección directa, con turbo e intercooler. Con Stop&Start. Normativa emisiones que cumple: Euro 6 DG. Etiqueta medioambiental DGT: ‘C’.
Transmisión.- Tracción: delantera. Caja de cambios: Automática DSG7. Embrague: doble.
Dirección.- Tipo: de cremallera, con asistencia eléctrica. Diámetro de giro entre paredes: 10,6 metros.
Frenos.- Delanteros, de discos ventilados; Traseros, de discos. Ayudas electrónicas: ABS, EBD, BAS, HSA, ASR, EDS y ESC.
Dimensiones, capacidades y pesos.- Carrocería: SUV. Puertas: 5. Plazas: 5 (2+3). Longitud: 4.108 mm. Anchura: 1.760 mm. Altura: 1.559 mm. Batalla: 2.551 mm. Maletero: 385-455 litros (máximo: 1.280 litros). Peso: 1.330 kg. Peso máximo admisible: 1.790 kg.
Prestaciones.- Velocidad máxima: 200 km/h. Aceleración de 0 a 100 km/h: en 8,5 segundos. Consumo combinado WLTP (100 km): 5,9 litros. Emisiones de CO2 WLTP: 134 gramos/km. Impuesto de Matriculación en España: 4,75%. Precio: con descuentos de marca, 26.215 euros (Sport); 25.995€ (Advance).