Hasta el día 2 de abril estará abierto el segundo espacio pop-up invernal del hotel Rosewood Villa Magna, tras la buena experiencia navideña con la pista de patinaje instalada en el jardín. En esta ocasión, los mejores sabores alpinos llegan a un chalet de madera instalado en el corazón de Madrid, en pleno Paseo de la Castellana, donde se ha preparado una cuidada propuesta gastronómica suiza con las famosas Raclette y Fondue suizas como protagonistas, pero ojo también a los postres.
El hotel trae al corazón de la ciudad los mejores sabores alpinos y la variada gastronomía de esta región en un espacio muy cuidado con una atmósfera cálida que recrea el ambiente de una cabaña de madera de localidades suizas como Gstaad o Zermatt, a base de listones de madera y decorada con detalles que nos trasladan a sus famosas pistas de esquí: raquetas, trineos de madera, esquís, mantas de pelo mánateles de cuadros y estufas de leña.
La propuesta gastronómica recoge los platos típicos y recetas suizas entre los que no pueden faltar las famosas fondues de queso para compartir en familia o con amigos, las raclettes, tablas de queso, ensalada de patatas y encurtidos, sopa de cebolla con queso gratinado, el Schnitzel de ternera, y de postre la tarta de manzana (Apple Strudel) acompañada con helado de vainilla. Y todo maridado con los mejores espumosos de la casa champanera Pierre Jouet.
El chalet suizo está abierto los miércoles de 19.30 a 23.00 horas, los jueves, viernes y sábados de 13.30 a 16.00 y de 19.30 a 23.00, y el domingo al mediodía es parte del Brunch (de 13.00 a 16.00 horas). El precio medio está en 60-70 euros/persona, incluidas dos horas de cortesía en el aparcamiento del hotel. Las reservas pueden hacerse en el teléfono 915 871 234 o en el correo villamagna.fnb@rosewoodhotels.com