Mercedes-Benz A 200d 8G-DCT

Disponible con tres motores de gasolina (136 CV, 163 CV y 224 CV) y tres diesel (116 CV, 150 CV y 190 CV), además de una versión híbrida enchufable (218 CV), el Mercedes Clase A de 5 puertas aporta mejora en confort, silencio de marcha y ayudas a la conducción respecto a la versión anterior.
 
Se nota en la buena habitabilidad interior, excelente para cuatro pasajeros pero algo menos si viajan cinco. Recordemos que el Clase A es un tracción delantera, y por eso con más espacio libre en la parte trasera, con un maletero de 370 litros de capacidad (29 más que su antecesor).
 
Al abrir la puerta del conductor se aprecia un llamativo y efectista interior: un puesto de mando de aspecto avanzado, materiales de tacto blando y cinco llamativas toberas de aireación iluminadas. El volante es de aro grueso, con comandos capacitivos a ambos lados para manejar dos grandes pantallas táctiles de 7,0 o 10,25 pulgadas (2.030 € formando parte de un paquete opcional), que destacan por su colorido y posibilidad de personalización. La primera aloja las esferas del velocímetro y tacómetro, la segunda, a su derecha, está dotada del sistema MBUX (opcional 1.210 €). En la consola, entre los asientos, se encuentra una superficie táctil “TouchPad” para manejar el equipo multimedia rodeado de botones de acceso directo a alguna de las funciones.
 
También admite órdenes vocales que se activan al pronunciar las palabras “Hey Mercedes” ¡Cuidado con eso! Porque el sistema puede asustar, emitiendo una estridente voz femenina que pregunta “¿En qué pudo ayudarle?”, mientras el conductor está abstraído oyendo música, por ejemplo.
 
Y hablando de sustos, la gran cantidad de sistemas de ayuda, que permanecen latentes mientras se viaja o al aparcar, emiten demasiados pitidos y señales de alerta que llegan a aponer de los nervios al conductor más tranquilo. Creo que merece la pena invertir unos minutos en examinar las opciones de personalización para desconectar algunos de ellos.
 
El exterior es sobrio, sin adornos innecesarios, con una gran estrella de tres puntas presidiendo la calandra delantera y cinco puertas de amplia apertura, solo el discreto alerón al final de techo resalta en la zaga. Los faros, bien perfilados, ofrecen una excelente iluminación LED de serie; opcionalmente, se pueden instalar otros con iluminación matricial Multibeam (556 €), muy interesantes para quien acostumbre a conducir de noche. El techo corredizo panorámico de cristal es opcional (1.524 €).
 
Esta vez probamos el segundo escalón de la gama diesel: un motor de dos litros que entrega 150 CV que bastan y sobran para proporcionar un gran rendimiento: veloz desde parado y casi instantáneo en las aceleraciones al adelantar, ayudado por la efectiva y cómoda caja de cambios automática de doble embrague con 8 velocidades, que es capaz de reducir dos o tres marchas en fracciones de segundo. Se trata de una caja sumamente suave en las transiciones entre marchas, pero algo brusca en las maniobras de aparcamiento.
 
Mediante un botón, se puede elegir entre cuatro modos de conducción: “Eco, Comfort, Sport e Individual” que modifican la respuesta del motor, de la dirección asistida, electrónica de la caja de cambios e incluso de la suspensión adaptativa, si cuenta con esa opción (1.319 €). El modo ECO incluye circulación “a vela”, dejando avanzar el coche por inercia al dejar de acelerar par rebajar el consumo. En nuestra exigente prueba, variando entre todos los modos de conducción, hemos medido 5,4 litros cada cien kilómetros, lo que nos parece una cifra realmente baja.
 
En marcha es muy silencioso, pero también poderoso acelerando desde bajas revoluciones, por lo que exige tratarlo con delicadeza en los cruces, por ejemplo, si no queremos escuchar el chirrido de las ruedas delanteras. Nuestra unidad estaba equipada con el tren de rodaje de altura rebajada y paquete AMG (1.222 €) de tal modo que su comportamiento en curvas es sumamente efectivo; vira totalmente plano, apoyado perfectamente en un tren de rodaje con llantas de 19 pulgadas (1.264 €) y neumáticos de muy bajo perfil que le dirigen como si fuera por raíles.
 
Esta opción tiene un inconveniente importante que nos obliga a desaconsejarla: deja la carrocería demasiado cerca del suelo, haciendo que cada badén y reductor de velocidad, que pueblan nuestras calles y carreteras, roce en los bajos al superarlo, incluso abordándolo a un ritmo muy bajo.
 
Dicen en la marca que la gran estrella que adorna la calandra aporta distinción y elegancia. A nosotros nos han agradado los 150 CV de su motor diesel por su notable rendimiento, muy bien hermanado con la eficaz caja de cambios automática de 8 marchas para viajar a ritmo alegre, con gran aplomo y sensación de seguridad sin que se resienta el consumo. Lástima que el precio sea alto porque a los 35.275 € de su precio base habrá que añadir otra buena suma por los abundantes extras.  
 
FICHA TÉCNICA
Mercedes-Benz A200d 8G-DCT
DIMENSIONES
Longitud: 4,419 metros
Anchura: 1,796 metros
Altura: 1,440 metros
Batalla: 2,729 metros
Peso: 1.490 kilos
Maletero: 360 litros

MOTOR
Combustible: diesel
Posición: delantero transversal
Cilindrada: 1.950 cc
Número de cilindros: 4
Potencia: 150 CV entre 3.400 y 4.400 rpm
Par máximo: 320 Nm entre 1.400-3.200 rpm
Cambio: automático 8 vel
Tracción: delantera

PRESTACIONES
Velocidad máxima: 220 km/h
Aceleración 0 a 100 km/h: 8,1 segundos
Consumo medio WLTP: 4,9 litros
Emisiones CO₂: 129 g/km

PRECIO: 35.275 €
 
J. Miguel Quintana – www.vidapremium.com