La colección de prêt-à-porter Spring/Summer 2022 es una oda al arte de vivir a la francesa: un recuerdo de un apetecible domingo soleado en la casa familiar de la Provenza, generaciones reunidas alrededor de una vieja mesa de roble decorada con cerámicas coloridas y manteles frescos.
El lino es uno de los temas principales de la colección ya que Longchamp ha colaborado con Charvet, proveedor de los mejores paños de cocina franceses de lino desde 1866, para crear la versión imprescindible de esta temporada del emblemático Le Pliage: un canvas de lino blanco con una franja vertical en rojo y azul. Al hilo de la exitosa colaboración del verano pasado con Filt y sus shopping realizados en malla, dos Maisons con historia se unen de nuevo para homenajear de manera vanguardista a la artesanía tradicional francesa.
En la colección de prêt-à-porter se dejan ver franjas y cuadros al estilo de un paño de cocina. Un minivestido sin mangas de popelín de algodón se presenta con una amplia franja roja a la altura del dobladillo, mientras que un vestido midi consigue un aire ligero gracias al algodón a cuadros. Estas dos prendas son una muestra de los contrastes que podemos encontrar en la colección entre lo mini y gráfico por un lado, y largo y vaporoso por otro. También los accesorios se apuntan a la temática de los paños de cocina, en particular un sobrero de tela a rayas y unas deportivas altas a cuadros.
Otras inspiraciones artesanales interpretadas por la Directora Creativa de Longchamp, Sophie Delafontaine, son la cerámica de colores vivos que disfruta coleccionando cuando está en el Sur de Francia, los bordados provenzales tipo boutis y los motivos florales suaves de las colchas. Ha querido incluir estas influencias eclécticas en una colección cargada de energía pero lejos de ser literal: el espíritu puede ser provenzal, pero la actitud es 100 % parisina.
En cuanto a la paleta de colores, blanco y crema manan de manera natural, y destacan con los tonos vibrantes como el amarillo, el coral, el verde y el azul, ya sean lisos o estampados. El print de hojas capta la frescura de la primavera, un motivo gráfico de rombos verdes recuerda a la alfarería esmaltada, mientras que un árbol de la vida que podría haber sido pintado por el propio Picasso queda plasmado sobre una túnica de algodón o sobre un vestido. Una gama de prendas en denim suave y aclarado por el sol resume el ambiente relajado de la colección, como el minivestido denim combinado con unos pantalones de rayas estilo paño de cocina.
Casi cada look incluye un detalle auténtico: un cinturón de cuero natural abrochado con desenfado, un sombrero de paja o un pañuelo de seda atado al cabello. Y casi todos se combinan con zuecos, a los que Longchamp otorga el espíritu urbano del mocasín, o con sandalias con suela de esparto y tiras deportivas.
Al margen del canvas Le Pliage, los bolsos clave de la temporada recuerdan a la cesta de mimbre tradicional y a formas de cubo. El emblemático Roseau regresa como bolso cubo con un cuero granulado maleable y tela jacquard con el print LGP, así como con motivos que se inspiran en el prêt-à[1]porter: el estampado de hojas, motivos de tapicería floral y franjas de algodón en azul y blanco. Más información en www.longchamp.com