Está claro que en Mercedes-Benz no quieren dejar ningún nicho por explorar, y así lo demuestra su extensa gama de productos. Aprovechando el complicado momento que viven las carrocerías monovolumen ante el empuje de los SUV, la firma alemana aprovecha su experiencia en vehículos comerciales para proponer una alternativa muy razonable a quienes necesitan una buena relación espacio/precio.
La solución se presentó la pasada primavera bajo la denominación Clase T, un nombre que revela la intención de Mercedes-Benz de situarlo en la división de turismos, separado del Citan Tourer, con unas dimensiones similares -4,50 metros y 520 litros de capacidad de maletero- y un planteamiento diferente. Es fruto de la colaboración que mantienen con Renault desde hace años en vehículos comerciales, por lo que hay algunos elementos comunes con el Kangoo.
Los responsables del Clase T lo definen como un “monovolumen compacto para una vida activa” y lo enfocan a familias viajeras y amantes del tiempo libre que se desplazan al campo o la playa con bastante equipaje y sus equipos para la práctica de deportes al aire libre. Se trata de un monovolumen de gama alta, con todas las tecnologías de seguridad y conectividad de la marca, acabados de gran calidad y un comportamiento dinámico que sorprende al ponerse al volante.
El segmento de las Small Vans (o furgonetas pequeñas) está viviendo un buen momento, y el recién llegado Clase T se las verá con rivales de peso como el Volkswagen Caddy, que en su quinta generación utiliza la misma plataforma del Golf, con dos tamaños de carrocería y versiones enfocadas al tiempo libre como la Caddy California, además de otros modelos de mucho nombre como el Ford Tourneo Connect o Renault Kangoo.
Por dimensiones es un vehículo compacto -4,50 metros de longitud, 1,86 de altura y 1,81 metros de altura-, con espacio para cinco adultos y la particularidad de que a la segunda fila se accede a través de dos puertas laterales correderas, pudiendo acoplar tres sillitas infantiles, algo que en coches mucho mayores no es posible. Además, para los próximos meses está prevista una variante de carrocería alargada, con capacidad para siete plazas con un ligero aumento del voladizo trasero.
Visto de frente, es un Mercedes-Benz en toda regla, con una rejilla en la que luce el logo de la estrella y unos trazos muy limpios en toda la carrocería. El techo se alarga hasta el borde trasero, donde encontramos un portón vertical que define la silueta y crea un habitáculo donde el espacio y la luminosidad son las notas dominantes gracias a la altura libre al techo y la gran superficie acristalada.
El puesto de conducción es similar al de una berlina, con asientos cómodos que sujetan bien el cuerpo –algunas versiones incluso en piel-, volante multifunción, cuadro de mandos que combina relojes analógicos y una pantalla vertical en el centro con los datos del ordenador de viaje, y la pantalla multifunción flotante táctil de 7” en el centro del salpicadero donde se aloja el sistema de entretenimiento MBUX, que conecta sin necesidad de cables con Apple CarPlay. Las salidas de aire circulares dan un toque clásico al conjunto, mientras que las luces LED ambiente, con hasta ocho tonos seleccionables, aportan ese toque moderno. Para la climatización se mantienen los mandos analógicos, y sobre ellos hay algunas teclas para las luces de emergencia, asientos calefactados, sensores de aparcamiento y sistema automático de aparcamiento. Todo con buena calidad de materiales y buenos ajustes.
Sin duda, uno de los puntos fuertes de este vehículo es su gran capacidad de carga, con un maletero al que se accede a través de un enorme portón de apertura vertical, suelo plano y una capacidad de 520 litros hasta la bandeja, aunque se puede ampliar notablemente por encima de ésta (775 litros) y supera los 2.000 litros si prescindimos de los asientos traseros. Los objetos voluminosos se cargan con facilidad gracias a que el borde está situado a 561 milímetros y el espacio es muy aprovechable, con la posibilidad de introducir una bicicleta sin necesidad de quitar las ruedas y todo lo necesario para practicar deportes de aventura, como tablas de surf, sin recurrir al portaequipajes del techo (viene con barras ya instaladas). Su vocación aventurera está clara, y por eso se ofrece como opción un módulo que cuesta 2.800 euros para convertirse en un pequeño hotel donde pernoctar en viajes, con una cama doble, cocina, lavabo y nevera.
El motor que lleva la unidad que hemos probado es uno de los más razonables de la gama, a pesar de las dificultades que atraviesan las mecánicas diesel. Es un bloque de cuatro cilindros en línea que entrega 116 CV y 270 Nm, asociado a una caja de cambios DCT de doble embrague con siete velocidades que se muestra muy eficiente, rápida y cómoda, sin que echemos de menos las levas en el volante.
El funcionamiento es correcto, tiene unas prestaciones aceptables, el ruido no es un tema que preocupe por el buen aislamiento y su gran baza es un consumo de combustible muy reducido. Los 5,6 litros que ha homologado el fabricante se pueden conseguir al realizar una conducción suave y si el recorrido no es muy sinuoso. En carretera ronda los 5 litros y en ciudad no sube de 7, pudiendo realizar unos 800 kilómetros con un depósito de 54 litros.
El Clase T está a la venta con un precio que parte de 23.801 euros (más IVA) en la versión de acceso con motorización de gasolina (T 160). Se puede solicitar con dos motores de gasolina (T 160 de 102 CV y T 180 de 131 CV) y dos diesel (T 160d con 102 CV y T 180d con 116 CV), en todos los casos con tracción delantera y cambio manual o de doble embrague 7G DCT.
La versión probada, T 180d Style con el cambio automático 7G DCT de doble embrague tiene un precio de 35.381 euros matriculada como turismo y con IVA incluido. Por ese precio, es difícil encontrar un coche con tanta cantidad de espacio interior y un maletero gigante, y no digamos ya un SUV. Por poner un ejemplo dentro de la misma casa, un Mercedes B, de 4,63 metros de longitud tiene un maletero de 570 litros, pero con el motor de acceso (GLB 180 de 136 CV) arranca en 41.600 euros.
Ficha técnica
Mercedes-Benz Clase T 180d 7G DCT
Dimensiones
Longitud: 4.498 milímetros
Anchura: 1.859 milímetros
Altura: 1.811 milímetros
Batalla: 2.716 milímetros
Peso: 1.678 kg
Depósito combustible: 54 litros
Maletero: 520 litros
Motor combustión
Tipo: gasóleo, delantero transversal
Cilindros: 4 en línea
Cilindrada: 1.461 cc
Potencia: 116 CV a 3750 rpm
Par máximo: 270 Nm a 1750 rpm
Tracción: delantera
Cambio: automático DCT 7 vel.
Prestaciones
Velocidad máxima: 177 km/h
Aceleración 0 a 100 km/h: 13,2 s
Consumo medio WLTP: 5.6 l/100 km
Emisiones CO2: 147 g/km
Etiqueta: C
Precio: desde 28.799 euros (T 160)
José A. Prados – www.vidapremium.com