Han pasado ocho años desde que Skoda lanzara el Kodiaq en 2016, un SUV del segmento D que ha dado muchas alegrías a la marca checa, con más de un millón de unidades vendidas desde esa fecha. Y la segunda generación es un salto importante porque supone una renovación completa de un modelo que crece ligeramente hasta los 4,76 metros de longitud, ofreciendo motorizaciones gasolina y diesel con etiqueta C, ECO y 0, además de soluciones prácticas para el día a día. Los precios parten de 35.950 euros en gasolina y 38.850 euros en diesel.
Ante todo, el Skoda Kodiaq sigue siendo un coche práctico que se va refinando con el paso de los años para ofrecer un aspecto cada vez más atractivo. El diseño no cambia de forma radical, pero incluye nuevos elementos del lenguaje Modern Solid como el logo 2D frontal, la parrilla octogonal cromada, una banda luminosa delantera horizontal, líneas con ángulos muy marcados y unos grupos ópticos con mucha personalidad, sobre todo la luz diurna delantera en forma de flecha que identifica a este modelo a distancia los pilotos LED traseros interconectados con intermitentes dinámicos.
Más atractivo, y también más tecnológico, porque el nuevo Kodiaq viene con los innovadores Smart Dials personalizables de Skoda, vistos ya en el Superb, que son los mandos para manejar diferentes funciones situados debajo de la gran pantalla táctil de 13 pulgadas que lleva en el centro del salpicadero, y también incorpora inteligencia artificial a través del chatbot ChatGPT, así como un Virtual Cockpit de 10” de serie que sustituye al cuadro de mandos analógico o el Head-up Display opcional.
Hereda una larga tradición en materia SUV que inauguró en 1966 el Skoda Trekka, desarrollado en Nueva Zelanda, y ya más recientemente, con el Yeti (2009), Kodiaq (2016), Karoq (2017), Kamiq (2019) y Enyaq (2020), que suman más de 3 millones de unidades vendidas en todo el mundo.
Los ingenieros de Skoda han creado un coche más eficiente en cualquier circunstancia, y aquí juega un papel muy importante la aerodinámica, puesto que el nuevo Kodiaq logra un coeficiente Cx de 0,282 en el que mucho tienen que decir las persianas de refrigeración activas y el diseño de los paragolpes delantero y trasero.
La longitud total es de 4,76 metros (crece 61 milímetros), 1,86 de ancho, 1,66 metros de alto y tiene una distancia entre ejes de 2.79 metros. El habitáculo es ahora ligeramente más amplio, con espacio para 5 o 7 ocupantes, con un maletero de 845 litros con 5 plazas, y de 745 en el caso de las versiones iV con tecnología híbrida enchufable. A pesar de no ser un vehículo 4x4, cuenta con interesantes ángulos de ataque (17º) y salida (17,6º), además de una altura libre al suelo de 188 milímetros para poder circular por zonas sin asfaltar.
En el interior se nota un mayor refinamiento, materiales de calidad y buenos ajustes que se traducen en mayor confort de marcha y un aspecto visual más moderno, con detalles como el Phone Box que permite la carga inalámbrica de dos móviles, el selector del cambio en la parte derecha del volante y un renovado Virtual Cockpit de 10 pulgadas que incluye nuevos gráficos.
A nivel mecánico, la oferta se compone de motorizaciones gasolina y diesel con potencias que van desde los 150 a 204 CV. Las dos opciones diesel son motores ya conocidos, el bloque 2.0 TDI con potencias de 150 y 193 CV, el primero con tracción delantera y el más potente con tracción 4x4, en ambos casos con etiqueta C de la DGT y cambio de doble embrague DSG de 7 velocidades.
Las novedades están en las mecánicas de gasolina. El modelo básico 1.5 TSI m-HEV de 150 CV es un bloque de cuatro cilindros que cuenta con hibridación ligera para obtener la etiqueta ECO y se conforma con muy poca cantidad de combustible en los desplazamientos, con una cifra homologada WLTP de 5,9 litros gracias a la ayuda de un motor eléctrico de 20 CV y una batería de iones de litio que suministra energía eléctrica.
La mecánica más novedosa en el nuevo Kodiaq lleva tecnología híbrida enchufable (PHEV) al sumar la potencia del motor 1.5 TSI de 150 CV a un motor eléctrico de 116 CV, ofreciendo una potencia conjunta de 204 CV. Lleva una batería de iones de litio de 25,7 kWh de capacidad (19,7 útiles), de modo que puede recorrer hasta 123 kilómetros en sin emisiones contaminantes, y cuando se agota entra en funcionamiento el motor de combustión. Un detalle importante es que la batería se puede cargar en corriente continua a 50 kW, empleando 26 minutos en pasar del 10 al 80% de su capacidad, y en corriente alterna admite hasta 11 kW, por lo que en 2,5 horas estaría cargada. El cambio es automático de 6 velocidades y tiene etiqueta 0 emisiones.
Es el modelo que hemos probado durante la presentación a la prensa especializada en Zaragoza por terrenos muy diferentes y con un resultado positivo. Arranca y se desplaza en silencio impulsado por el motor eléctrico y tan solo se aprecian los ruidos de rodadura que se filtran en el habitáculo, escasos, porque está muy bien insonorizado. La respuesta al acelerador es casi inmediata y el confort de marcha es muy bueno, como si fuésemos en una berlina algo más elevada.
A pesar de tratarse de un tracción delantera –este modelo solo está disponible en 4x2 y con 5 plazas-, la organización nos preparó un recorrido offroad por caminos y pistas por donde inicialmente discurría la Baja Aragón, muy divertidos por la lluvia caída en las jornadas anteriores y donde el Kodiaq demostró que no es un coche sólo de ciudad y asfalto. En carretera, el confort es absoluto y resulta muy agradable de conducir por el tacto de la dirección, la suavidad mecánica y un chasis bastante equilibrado.
Y como un buen Skoda puede equipar soluciones Simply Clever como un paraguas oculto en las puertas delanteras, protectores de las puertas para no dañar a los coches que están aparcados alrededor, carga inalámbrica refrigerada para dos móviles, sistema de sujeción de la carga del maletero con separadores de aluminio y hasta un dispositivo para limpiar la pantalla del sistema multimedia.
En cuanto a seguridad, puede equipar hasta 10 airbag (8 de serie), sistema de aparcamiento asistido Park Assist con la función que memoriza maniobras habituales y el sistema Remote Park que aparca el coche desde la aplicación MySkoda.
La oferta comercial se compone de los motores citados anteriormente con potencias de 150 a 204 CV y tres acabados: Selection, Design (+3.000 euros) y Sportline (+4.400 euros), además de paquetes opcionales simplificados que incluyen 7 paquetes de equipamiento y 4 tapicerías. A final de año se unirá una versión más deportiva con el sello RS.
Precios del nuevo Skoda Kodiaq sin descuentos / contado:
1.5 TSI m-HEV 150 CV DSG: 42.960 / 35.950 euros
2.0 TDI 150 CV DSG: 46.060 / 38.850 euros
2.0 TDI 150 CV DSG: 49.160 / 41.750 euros
1.5 TSI iW 204 CV PHEV: 49.560 / 42.300 euros
No está incluido el Plan Moves, que son 4.500 o 7.000 euros con achatarramiento.