Renault MORPHOZ Concept Car
04 de marzo de 2020 NovedadesInteligente y modular, este prototipo representa la visión de la movilidad de la marca francesa desde 2025: eléctrico y compartido.
Este prototipo se adapta a todos los usos, tanto en el día a día con los habituales recorridos urbanos como en desplazamientos de mayor distancia, un vehículo que también se puede compartir cuando su dueño no lo utiliza, integrándose en ecosistemas variados que favorecen el intercambio y la movilidad sin emisiones en las grandes urbes.
Es la visión futurista a corto plazo de los ingenieros de Renault más allá del año 2025 en un vehículo que aprovecha la plataforma modular eléctrica CMF-EV de la Alianza para ofrecer varias configuraciones de potencia, de capacidad de la batería y de autonomía, así como de habitabilidad y volumen del maletero, prefigurando cómo será la nueva familia de modelos eléctricos en los próximos años.
El principal freno a la compra de un vehículo eléctrico sigue siendo la autonomía de las baterías –además de la falta de infraestructuras públicas de recarga-, una idea restrictiva de la movilidad que desaparecerá muy pronto, y el concept car MORPHOZ es la mejor prueba de ello, según afirman los responsables del proyecto.
“MORPHOZ prefigura nuestros próximos modelos eléctricos de altas prestaciones. Su plataforma modular específica CMF-EV optimiza la eficiencia energética del vehículo mientras que su mayor distancia entre ejes con su piso plano y con ruedas llevadas a las cuatro esquinas, ofrece nuevas posibilidades para un diseño impactante y una habitabilidad récord”, explica Guilles Normand, director de la división de vehículos eléctricos y servicios de movilidad del Grupo Renault.
La utilización de una plataforma modular posibilita la configuración de un vehículo que responde a las necesidades de usuarios muy distintos. Así, contaría con una versión corta denominada City de 4,40 metros de longitud, distancia entre ejes de 2,73 metros y una batería de 40 kWh para recorrer hasta 400 kilómetros sin emisiones contaminantes, mientras que la versión larga Travel crece hasta los 4,80 metros, una batalla de 2,93 metros y aloja en la parte inferior del chasis unas baterías de 90 kWh, que ofrecen una autonomía de hasta 700 kilómetros en autopista.
El interior es bastante innovador, con un volante futurista que aloja en el centro una pantalla de 10,2” en la que se muestran las principales informaciones de conducción y seguridad, además del salpicadero habitual detrás con el tradicional cuadro de instrumentos y la pantalla multimedia. En el cuadro de instrumentos LIVINGSCREEN se ofrece una pantalla adicional que se despliega bajo demanda, combinando las visualizaciones de conducción y la del sistema multimedia, estando disponible tanto para conducción manual como autónoma (nivel 3).
El asiento del conductor está orientado hacia la carretera, pero el asiento del acompañante se puede girar en sentido opuesto para configurar el habitáculo como un salón en el que los pasajeros dispondrán de una consola central compartida y una gran pantalla.