Este es un año muy importante para la marca SsangYong en Europa. Si hace unas semanas nos poníamos a los mandos del SsangYong Musso Sports, un robusto pick-up para trabajos profesionales y de ocio, el protagonista de este artículo es el SsangYong Korando e-Motion, el primer vehículo 100% eléctrico de la firma, en su apuesta por la electrificación, al que seguirá a comienzos de 2024 un nuevo modelo bajo la denominación Torres EV.

 

Este SUV de 4,46 metros de longitud, 1,87 de anchura y 1,65 metros de altura deriva directamente del SsangYong Korando, y sobre esta plataforma se ha construido la versión 100% eléctrica, manteniendo la capacidad para superar obstáculos fuera del asfalto (ángulo de ataque de 19,5º, ángulo ventral de 15º, ángulo de salida de 25º y altura libre al suelo de 169 mm), aunque carece de reductora y tracción total.

 

El verdadero hábitat de este modelo ‘cero emisiones’ es el entorno urbano, donde se mueve prácticamente en silencio y con una suavidad que llama bastante la atención. No es un coche que brille por sus prestaciones, pero si por la eficiencia en la gestión de la energía acumulada en sus baterías. Está impulsado por un motor eléctrico de 190 CV y 360 Nm de par máximo que se transmite a las ruedas delanteras mediante una transmisión automática y se alimenta con un conjunto de baterías de iones de litio de 62 kWh, alcanzando una autonomía WLTP de 339 km en ciclo combinado y de 474 en ciclo urbano.

 

El consumo medio de energía homologado WLTP es de 16,8 kWh, una cifra similar a la que hemos obtenido durante la prueba por vías rápidas de Madrid y callejeando por el centro sin mucho tráfico. La velocidad máxima es de 156 km/h y acelera de 0 a 100 en 8,4 segundos.

 

La batería tiene un voltaje de 366 voltios y se puede cargar en una toma de 7 kW doméstica en unas 8 horas al completo, mientras que en cargador rápido admite hasta 100 kW, realizando la carga del 20 al 80% en tan solo 20 minutos. La garantía de la batería es de 7 años o 150.000 kilómetros, mientras que la del vehículo es de 5 años o 100.000 kilómetros.

 

Mediante un botón junto a la palanca del cambio se puede seleccionar uno de los cuatro modos de conducción –Confort, Sport, Eco y Eco+-, que modifican el comportamiento del acelerador y otros parámetros para dar prioridad a la comodidad, deportividad y eficiencia. El modo más equilibrado es Comfort, y para sacar el máximo rendimiento a la batería es conveniente conectar el modo Eco+ y realizar una conducción suave. Además, con las levas situadas tras el volante tenemos la posibilidad de aprovechar la energía de las deceleraciones y frenadas para recargar la batería, y utilizando el nivel máximo de los tres disponibles, el coche se conduce sin pisar el freno.

 

La estética varía ligeramente de las versiones de gasolina, sobre todo en el frontal, donde lleva una parrilla cerrada al no necesitar entrada de aire para refrigerar el motor de combustión, además de unos grupos ópticos LED con una tira de color azul en la parte inferior y pilotos traseros LED.

 

En el interior destacan los tonos azules en algunos detalles del volante y el salpicadero, así como la pantalla del cuadro de mandos digital de 12,3” con abundante información sobre el consumo, estado de la batería, estilo de conducción, etc, más una pantalla multifunción de 8” en el centro del salpicadero, que es compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Las plazas delanteras son amplias y cómodas, con varios huecos para dejar pequeños objetos, y en las traseras también hay mucho sitio, contando con un maletero de los mejores de su categoría: 551 litros, ampliables a 1.248 litros al abatir los asientos traseros.

 

Se comercializa en cuatro colores de carrocería y dos acabados, Urban –desde 27.900 euros con los descuentos promocionales y el Plan Moves incluido-, y Limited desde 30.900 euros, precios mucho más competitivos que los de sus rivales directos, entre los que se encuentran el Hyundai Kona, Kia Niro, Opel Mokka o Peugeot 2008 con sus versiones 100% eléctricas.

 

En cuanto a seguridad, incorpora sistemas como la frenada autónoma de emergencia, aviso de mantenimiento de carril, advertencia de fatiga del conductor, 6 airbag (tres más de forma opcional), reconocimiento de señales de tráfico, luces automáticas HBA, control de ángulo muerto, alerta de tráfico cruzado trasero, asistente de arranque en pendiente y hasta control de descenso en pendientes para una conducción más cómoda.

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