A finales de mayo, durante la Aircraft Interiors Expo en Hamburgo, Alemania, Air France presentó en exclusiva las nuevas cabinas para su flota de Embraer 190, operada por su filial regional HOP! La renovación de estas aeronaves refuerza el compromiso de la aerolínea de mejorar y unificar sus productos y servicios en rutas de corta y media distancia. En España, estos aviones operan regularmente entre Bilbao, Sevilla, Valencia y París-CDG.
Los Embraer 190 contarán con 110 asientos nuevos en una configuración 2-2. Estos asientos estarán tapizados en cuero y equipados con espumas ergonómicas para mayor comodidad y durabilidad. Cada asiento será reclinable hasta tres pulgadas, tendrá 46 cm de ancho, y estará equipado con una bandeja, espacio de almacenamiento optimizado, reposabrazos abatibles y soporte para chaquetas. El reposacabezas será ajustable tanto en altura como lateralmente.
Además, todos los asientos contarán con un soporte retráctil a la altura de los ojos, diseñado para sostener smartphones o tabletas de forma estable. También habrá puertos USB A y C para recargar dispositivos personales, incluido el ordenador portátil, y un portavasos doble para mayor practicidad.
En clase Business, los pasajeros se sentarán en las primeras filas, y para mayor comodidad e intimidad, una cortina móvil aislará esta sección. A partir de enero de 2025, cada cliente de esta clase tendrá un asiento libre a su lado, aumentando así el confort durante el vuelo.
Cabina luminosa y elegante
La cabina del Embraer 190 adoptará los colores distintivos de Air France: tonos azules, predominancia del blanco que aporta luminosidad y contraste, y toques de rojo que simbolizan la excelencia y el saber hacer de la aerolínea. Cada asiento estará decorado con un pespunte simétrico en hilo gris, evocando la idea del capitoné, sinónimo de confort. El reposacabezas llevará el bordado del acento, el símbolo de Air France, visible también en la parte trasera de la cabina para dar perspectiva al conjunto. El suelo estará cubierto con una moqueta que retoma el tradicional motivo en espiga, inspirado en el emblemático estilo Haussman de los pisos parisinos.
Para el diseño de estos asientos, Air France se ha asociado con el fabricante francés Expliseat, colaborando con el diseñador Andrea Mocellin. Fabricados en fibra de carbono y titanio, los asientos son ultraligeros y robustos, incorporando elementos reciclados y reduciendo el uso de plástico al mínimo.
Cada asiento nuevo es un 30% más ligero que los modelos actuales, lo que ayuda a reducir el peso total del avión, disminuyendo así el consumo de combustible y las emisiones de CO2. Esta iniciativa es parte de la estrategia de Air France para reducir su huella de carbono, complementada con la renovación de su flota, el aumento del uso de combustibles sostenibles de aviación y el desarrollo de prácticas de eco-pilotaje.
Fabricados a medida para cumplir con las necesidades de la aerolínea, estos asientos se producirán en Angers, Francia. El reacondicionamiento de los Embraer 190 comenzará en el centro de mantenimiento de HOP! en Clermont-Ferrand después del verano.