Los empleados de la fábrica de Oxford (Inglaterra) han recordado que hace 15 años se inició la nueva era del MINI con el relanzamiento de la marca británica por parte del grupo BMW y el primer modelo que salía de la cadena de producción era un MINI Cooper Rojo Chilli, al que han seguido 2,5 millones de unidades que se han vendido en más de 110 países de todo el mundo.
Hoy en día, la planta de MINI se encuentra entre las sedes de fabricación de automóviles más avanzadas del mundo. La cifra de empleados ha subido de los 2,400 del principio, a los actuales 4.500. La plantilla monta aproximadamente 1.000 vehículos por día en tres turnos.
Una de las características especiales de esta sede de producción es un grado de flexibilidad excepcional. Actualmente se fabrican cuatro modelos en Oxford. Cada coche se construye de forma precisa según los deseos del cliente, basado en la típica y amplia selección de MINI en cuanto a equipamiento opcional, pintura, colores del interior y variantes de acabado. La última generación de los modelos deportivos John Cooper Works también son “made in Oxford”. “Fabricar 1.000 automóviles Premium con configuración individual cada día es un gran reto que nuestros empleados cumplen gracias a su excepcional nivel de pasión y habilidad”, comenta el responsable de la planta, Frank Bachmann.
La historia de la producción automovilística de Oxford se remonta a hace más de 100 años. Ya en 1931, el Morris Oxford entraba en producción. También se llamaba “Bullnose” por la forma de la parrilla del radiador. El primer coche que vendió un millón saliendo de esta planta de Oxford fue el Morris Minor en 1948, que se fabricó hasta 1971.
El clásico Mini se fabricaba en Oxford, como el Morris Mini-Minor desde el año de su nacimiento. La decisión de fabricar el MINI moderno aquí desde el principio se tomó en la primavera de 2000. Tras un extenso y rapidísimo proceso de modernización que duró solamente 13 meses, todo estaba listo para otra revolución en el segmento del coche pequeño. El MINI tuvo un comienzo impresionante como el británico original del siglo XXI. Las cifras de producción previstas inicialmente se sobrepasaron muy pronto y una segunda variante entró en la gama de modelos. Los primeros MINI Convertibles salían de la planta de Oxford en primavera de 2004.
Con el cambio de generación en otoño de 2006, las sedes de fabricación se integraron ya completamente en el triángulo de producción MINI, con Oxford (construcción de chasis, pintura y ensamblaje), Swindon (planta de prensado) y Hams Hall (construcción de motor). Las continuas actividades de expansión y modernización hicieron posible tanto el incremento de la capacidad de producción como la ampliación de la gama de modelos. En total, BMW Group ha invertido más de 1.750 millones de libras en las sedes de producción de gran Bretaña desde el año 2000.
En otoño de 2007, la señal de inicio sonaba en Oxford para el MINI Clubman, la versión con batalla más larga, mayor capacidad de transporte e innovador diseño de puertas que ahora se vendía junto con el MINI de diseño de chasis tradicional. La nueva edición del MINI Convertible salía de la cadena de producción justo a tiempo para el 50 aniversario de la marca. El MINI Coupé le seguía en 2011 y un año después, un segundo coche pequeño descapotable Premium, el MINI Roadster, se fabricaba por primera vez en Oxford.
La actual gama de modelos fabricada en Oxford también ofrece diversión de conducción Premium para emocionar a una amplia gama de grupos objetivo. La actual generación MINI comprende el MINI 3 puertas y el MINI 5 puertas. Además, la planta MINI de Oxford ha sido la sede de producción exclusiva para el nuevo MINI Clubman, con el que la marca también está conquistando el segmento del compacto Premium. La última adición a la gama de producto también se fabrica en Oxford. El nuevo MINI Clubman no solamente se fabrica con tracción delantera típica de la marca, sino también con tracción a las cuatro ruedas ALL4.