Esta temporada tiene que ser buena tras el parón de la pandemia que tuvo las estaciones de Aramon completamente cerradas el año pasado. Hay mucha ilusión y también muchas novedades para todas las estaciones aragonesas, en las que se ha realizado una inversión de más de 20 millones de euros que permiten tener un dominio esquiable de casi 300 kilómetros, con tres nuevos telesillas y dos nuevas zonas esquiables.

 

El objetivo de todas estas inversiones es mejorar la experiencia del esquiador que visita estos destinos de nieve, con mejores instalaciones, que estarán abiertas a partir del 3 de diciembre si las condiciones climatológicas lo permiten, la primera gran cita con la nieve de la temporada, y con bastante espesor tras las últimas nevadas.

 

El dominio esquiable de Aramon para la temporada 2021/2022 es el mayor de España, con 294 kilómetros repartidos en sus cinco estaciones (Cerler, Formigal, Javalambre, Panticosa y Valdelinares). Las inversiones realizadas durante estos últimos meses han permitido la instalación de tres nuevos telesillas –Castanesa en Cerler, y Lanuza y Pico Royo en Formigal-Panticosa-, pero también se ha invertido en tecnología de innivación en las pistas, sostenibilidad y digitalización de los servicios para evitar colas.

 

La estación de Cerler celebra 50 años, y no hay mejor regalo que la ampliación en la zona de Castanesa, un proyecto que a medio plazo supondrá un nuevo acceso desde la N-230 en Montanuy, una zona deprimida por su baja población dedicada a la ganadería y que verá con buenos ojos la llegada de más oportunidades laborales para su gente. El nuevo telesilla Castanesa da acceso a cuatro nuevas pistas de esquí en un nuevo valle con atractivos paisajes.

 

Formigal-Panticosa también estrena nuevas pistas desde el collado de Lapazuso con el nuevo telesilla Pico Royo instalado este verano, una zona para esquiadores expertos con pistas rojas y negras. A este remonte se suma otro nuevo instalado anteriormente, el de Lanuza, un D-Line de la firma Doppelmayr que circula a 6 m/s, el primero de estas características en España.

 

Una parte de las inversiones se ha dedicado a la sostenibilidad de las estaciones y su entorno, con nuevos proyectos que darán vida a una zona deprimida, ya que de las montañas de Aramon vive el 80% de su plantilla. El compromiso es reducir la huella de carbono, continuar con la recogida selectiva de residuos que el Grupo Aramon implantó de forma pionera, invirtiendo en tecnología para la producción de nieve con una mayor eficiencia energética.

 

El forfait-monedero Aramon Cashless se estrena esta temporada, fomentando el sistema de pago con descuentos y ligado al Club Aramon y la APP. La web se ha rediseñado para que el esquiador tenga mayor protagonismo y desde Viajes Aramon se apuesta por servicios como la entrega del alquiler en hoteles y también del forfait.

 

Todo esto se complementa con la creación de nuevas experiencias en la nieve, como dormir bajo las estrellas en Las Mugas, unas cabañas situadas a 1.800 metros de altitud en la estación de Formigal con todas las comodidades, o un atardecer en el Skyline de Cerler a casi 3.000 metros de altura, las zonas de trineos de Javalambre y Valdelinares, o el Showcooking para degustar una ‘cena de altura’ en Cerler y descender en plena noche hasta la estación.

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