Suzuki S-Cross

Los todocamino de tamaño compacto –también conocidos como SUV- se están haciendo con una buena parte del segmento C porque su estética más campera, carrocería alta y amplio habitáculo ha triunfado entre un público que busca una posición de conducción más alta. Ya no son una moda pasajera, y como han venido para quedarse, todos los fabricantes se han posicionado en este segmento que lidera el Nissan Qashqai, con numerosos competidores de gran nivel como el Kia Sportage, Peugeot 2008, Ford Kuga, Renault Kadjar o Hyundai Tucson.
 
La oferta es muy amplia, con modelos Premium y también generalistas, entre los que ahora también se encuentra el nuevo Suzuki S-Cross, un vehículo que nació en 2006 y que pasó sin pena ni gloria por los concesionarios de la marca japonesa también en su segunda generación (2013) con la denominación SX4.
 
Las cosas han cambiado sustancialmente y el nuevo Suzuki S-Cross es un coche que llega con argumentos para triunfar, como ha sucedido en los lanzamientos más recientes de la marca japonesa, tanto el Suzuki Vitara en el terreno SUV como el Suzuki Baleno en la categoría de berlinas compactas a un precio razonable.
 
La apariencia del Suzuki S-Cross es muy agradable, siguiendo la línea de los vehículos que triunfan en este segmento: una carrocería tipo SUV con un diseño robusto, un estilo más refinado, amplio habitáculo y una completa gama de motores en gasolina y diesel que cumplen con las necesidades del público al que va dirigido. A todo ello hay que sumar un precio bastante competitivo, pues con la oferta de lanzamiento el modelo más básico de gasolina sale por 15.435 euros.
 
Es la alternativa a los coches compactos de toda la vida, pero con un aire diferenciador. Los cambios más significativos están en el frontal, que resulta más llamativo con la rejilla cromada de barras verticales y el logo en el centro, las protecciones de los bajos, protecciones laterales, barras de techo, capó de líneas más marcadas y llantas de nuevo diseño de 16 y 17” con neumáticos de mayor tamaño (hasta 215/55R17). También estrena faros delanteros con luces LED y ópticas traseras LED, mucho más modernas y atractivas.
 
Las cotas principales del S-Cross apenas cambian (4,30 metros de longitud y 2,60 metros de batalla), pero es un poco más alto y algo más ancho (20 milímetros), con una distancia libre al suelo de 180 milímetros (+15 mm) que permiten al coche circular por zonas sin asfaltar. El maletero tiene una capacidad de 430 litros, ampliable hasta 1.270 si se abaten los asientos traseros.
 
La oferta mecánica es bastante completa, con dos motores de gasolina -1.0 de tres cilindros con 111 CV de potencia y cambio manual de 6 velocidades y 1.4 de cuatro cilindros con 140 CV y cambio manual de seis velocidades o un magnífico cambio de doble embrague que funciona estupendamente- y un diesel 1.6 de 120 CV que ofrece un buen rendimiento y consumos bajos.
 
El interior también ha sido renovado en profundidad y da la sensación de mayor calidad con los nuevos materiales, un estilo más limpio, detalles cromados en el marco del panel central y nuevas tapicerías de tela que resultan más alegres. No es espectacular, pero cumple su función y ofrece al conductor la información necesaria de una forma ordenada y correcta. Los relojes del cuadro de instrumentos lucen ahora un diseño más moderno con la pantalla central del ordenador de viaje y también es novedad el panel central en color negro piano, detalles que suben el nivel del coche.
 
En nuestra toma de contacto hemos elegido los dos modelos de gasolina BOOSTERJET, que serán los que más ventas acaparen si el diesel sigue encontrando dificultades en su camino durante los próximos años. El 1.0 sorprende porque no parece que sea un motor tricilíndrico y se mueve con soltura en cualquier tipo de carretera sin que el consumo resulte elevado en ningún momento. El 1.4 es la opción más interesante si el cliente busca un nivel mayor de prestaciones, y la combinación perfecta es con el cambio de doble embrague con seis velocidades, que resulta efectiva y muy cómoda, nada que ver con las de variador continuo que son una tortura para el conductor y los pasajeros.
 
La tracción integral 4WD sólo está disponible en el 1.4 gasolina y el 1.6 diesel, pudiendo elegir entre una paleta de 9 colores, cuatro de ellos nuevos –Azul Esfera, Gris Mineral, Marrón Canyon y Rojo Energetic-. Hay cuatro niveles de acabado, y desde el más básico, denominado GL, ya trae elementos como la conexión Bluetooth, volante con mandos para el audio y teléfono manos libres, control de retención en pendientes y sistema Auto Start Stop que contribuye a la reducción del consumo y emisiones.
 
Una de las novedades en el campo de la tecnología es que puede montar el Control de Velocidad Adaptativo (ACC), una función que está integrada en el asistente de frenada de emergencia con radar (RBS), de gran utilidad en atascos o para evitar sustos por una distracción. También hay cambios en la dirección, con un tacto más agradable, y las suspensionies.
 
Suzuki ofrece 5 años de garantía en el mercado español y los precios de venta recomendados del nuevo Suzuki S-Cross –a los que hay que descontar 2.300 euros de la campaña de promoción y otros 1.500 euros si el cliente escoge la financiera de la marca- son los siguientes:
S-Cross 1.0 DITC 6MT GL 2WD: 19.235 euros
S-Cross 1.0 DITC 6MT GLX 2WD: 21.135 euros
S-Cross 1.4 DITC 6MT GLX 2WD: 24.885 euros
S-Cross 1.4 DITC 6AT GLX 2WD: 26.385 euros
S-Cross 1.4 DITC 6MT GLX 4WD: 26.685 euros
S-Cross 1.6D 6MT GLE 2WD: 23.135 euros
S-Cross 1.6D 6MT GLX 2WD: 25.685 euros
S-Cross 1.6D 6MT GLE 4WD: 24.935 euros
S-Cross 1.6D 6MT GLX 4WD: 27.485 euros
S-Cross 1.6D 6DCT GLX 4WD: 28.985 euros
 
José A. Prados – www.vidapremium.com