Es uno de los cocineros españoles con mayor fama fuera de nuestras fronteras y ahora emprende un nuevo reto en Las Bahamas al inaugurar un restaurante de lujo en The Cove en el que ofrecerá marisco procedente de la pesca sostenible con auténticos sabores de la zona. José Andrés ya tiene una estrella Michelin y ahora se embarca en este nuevo proyecto ubicado en el lujoso resort Atlantis, donde únicamente se servirán cenas.
Junto a sus artes como chef innovador, José Andrés es conocido por su apoyo a diferentes acciones humanitarias y el menú que ha preparado en el restaurante Fish The Cove reafirma el compromiso de este establecimiento con la ecología y la protección de uno de los recursos más preciados del país, el océano. Es una manera de apoyar las prácticas sostenibles en Las Bahamas, e incluye entre sus platos estrella uno a base de un pescado local llamado pez león, delicioso pero que daña gravemente los arrecifes de coral al ser una especie invasora y afecta al equilibrio marino.
José Andrés es un gran aficionado a la pesca y el buceo, por lo que se ha involucrado en la defensa de los arrecifes, de manera que parte de lo recaudado con este plato se destinará a la fundación ‘Blue Proyect’, una organización sin ánimo de lucro dedicada a proteger las especies marinas y su extraordinario hábitat.
Con técnicas de cocción y preparación que van desde lo sencillo y sabroso hasta otras más innovadoras y creativas, la cocina del Chef Andrés se puede degustar tanto en pequeñas raciones para compartir entre amigos o como plato principal. El restaurante destaca por su marisco fresco, como por ejemplo el caracol de Las Bahamas, preparado en su tradicional “Scorched Conch” (Caracola chamuscada) o, versionado a modo del Chef, en su concha frita con corazón líquido, con un sabor muy parecido a las croquetas españolas. El menú también incluye otro plato estrella del Chef Andrés y su equipo, que transforman otro “hit” del arte culinario de Las Bahamas, el local “Hog Snapper” (Pargo de cerdo) asado en brasas y servido con ensalada de endivias crujientes, almendras marcona y rábanos; otro plato destacado es el “Seared Scallops” (Vieiras chamuscadas) con corazón de palmeras Hawaianas, tamarindo, alcaparras y cítricos.
La zona principal del restaurante “Fish” cuenta con dos hornos Josper, cuyas altas temperaturas son aprovechadas por los chefs para preparar platos como las “Ostras asadas”; una versión propia del “Jerk Chicken” (Pollo tonto) y un gran número de platos vegetales, todos cocinados con un ahumado perfecto. Los Josper también permiten crear un delicado caramelo para el postre de piña asada, servida con sorbete de tamarindo y coco. Los comensales pueden disfrutar también del postre “Chocolate Paradise” (Paraíso de Chocolate), servido con crema de chocolate especiada, crumble de cacao, caramelo de fruta de la pasión y helado de merengue.
Para acompañar la comida, los comensales pueden escoger entre alguno de los innovadores cocteles, preparados en el momento, como el “A Bird in the Hand” (Pájaro en Mano), preparado con Ron de plantaciones de piña, Ron Appleton Estate Rare Blend, Aperol y Carpano Formula Antica Sweet Vermouth; o el “Apollo nº2” preparado con Vodka Elyx, St. Germain, Cocchi Americado Blanc Vermouth, limón, jengibre y soda. Además, una extensa carta de vinos elaborados en las regiones más prestigiosas de Europa o Estados Unidos permite acompañar y disfrutar del increíble marisco del restaurante.
El diseño del restaurante Fish realizado por la firma española, Capella García, está pensado para provocar en los comensales la sensación de estar navegando en un mundo submarino, inmersos en la vida marina, en las rocas, la arena, la flora y la fauna que habitan el océano. Las paredes se han pintado con una romántica paleta de azul cerúleo, perla y tonos azules, y el espacio abierto crean una atmósfera tranquila y elegante. El espacio resultante es elegante, cómodo a la vez que vanguardista con un toque natural.
Los comensales al entrar al establecimiento son recibidos en un hall residido por una grandiosa lámpara cilíndrica colgante realizada con cientos de peces blancos y dorados de cerámica, que giran con el viento, a modo de bienvenida. A la derecha nos topamos con un impresionante bar, cuya espectacular barra evoca una gran ola, invitando a los comensales a tomar un refrescante cóctel. En el comedor, unos grandes ventanales conectan el espacio con las playas de arena banca del resort, el increíble cielo bahameño y la exuberante vegetación.
El comedor, bañado en diferentes colores que recuerdan el océano, la arena y los colores coralinos, dispone de diferentes opciones a la hora de sentarse, que van desde íntimas mesas o mesas compartidas, hasta espacios exclusivos para fiestas, donde ligeras cortinas tipo “redes de pesca” ofrecen privacidad a los invitados a la vez que siguen formando parte del restaurante. Fish incluye además, una zona grill, un bar de marisco crudo y unos tanques de pescado, que convierten la experiencia en un espectáculo para los comensales que pone, en valor, una vez más, las maravillas de las profundidades del océano.
Los grandes murales que se pueden ver en todo el espacio, con imágenes de la fotógrafa, Elena Kalis, residente en Las Bahamas, trasladan a los comensales a un silencioso y tranquilo mundo submarino. En el centro del comedor se puede admirar colgando un pez Koi hecho a mano por los diseñadores españoles Inocuo The Sign y LZF Lab, con delicadas tiras de madera entrelazadas.
Ubicado entre las playas Paradise y Cove, The Cove ofrece un abanico culinario inigualable, suites y un ambiente de relax a proximidad de la playa, creando la sensación de encontrarse en un santuario privado de arena blanca. The Cove se ha convertido en un destino de vacaciones Premium para los que buscan una experiencia cercana a la cultura y la cocina de Las Bahamas.