El enólogo Josep Grau conmemora dos décadas de dedicación a la recuperación del patrimonio vitivinícola del Montsant, una región que ha sido su inspiración desde que inició su trayectoria en 2003. Este 2024, Grau celebra su último proyecto, El Pas de l’Estudiant, que pone de manifiesto su profunda conexión con el territorio y su compromiso con la restauración de viñedos históricos.

 

Este nuevo proyecto destaca por la recuperación de una finca abandonada durante más de 40 años, invadida por el bosque, pero que en su origen, se remonta al siglo XIX. Ubicada en Capçanes, un pequeño municipio de la D.O. Montsant, la finca es un ejemplo del esfuerzo de Grau por rescatar viñedos antiguos que, según él, “recuperan el patrimonio perdido de la zona a través de un gran vino”.

 

Desde que compró su primera viña en 2003, Grau ha trabajado incansablemente para devolver a la vida los paisajes vitícolas del Montsant. Su dedicación ha crecido con el tiempo, ampliándose también a la D.O.Ca. Priorat, donde sus vinos siguen reflejando el entorno único de estas tierras catalanas.

 

Un viñedo con historia

El Pas de l’Estudiant es un viñedo monumental, situado a más de 320 metros de altitud, en un impresionante anfiteatro natural orientado al norte. Con sus antiguos bancales de piedra seca, esta finca destaca no solo por su belleza paisajística, sino también por su historia. Según documentos encontrados por Grau, el viñedo tiene más de 150 años, aunque los estudios recientes sugieren que su uso podría datar de mucho antes.

 

El nombre del viñedo y del vino rinde homenaje a un niño de la Sierra de Almos que, según la tradición, recorría a pie diariamente el camino para asistir a la escuela en Capçanes, a más de cinco kilómetros.

 

Agricultura vernácula y sostenibilidad

Grau ha tomado como misión respetar el viñedo existente, que había sido plantado en 1947. En la parte inferior del terreno cultiva garnacha peluda y, en la zona más alta, cariñena. Estos viñedos reciben una mayor exposición solar gracias a su orientación y se benefician de la influencia mediterránea. Los antiguos sistemas de riego y el camino de herradura que rodea el viñedo son parte del legado agrícola de la región, un testimonio de la antigua sabiduría campesina.

 

Este 2024, tras obtener los permisos necesarios, Josep Grau comenzará la restauración final del viñedo, culminando su proyecto de recuperación. Como él mismo señala, su objetivo es claro: “recuperar el patrimonio perdido de la zona a través de un gran vino”.

 

Según la nota de cata de Josep Grau, “en la copa, el vino muestra una presencia etérea que nos envuelve y nos llena de aromas, haciendo presente la fruta roja que nos recuerda las pequeñas cerezas del bosque que rodea la bodega. Poco a poco, el vino crece haciéndose absolutamente grande, con un equilibrio maravilloso. Es un vino puro, limpio y vibrante, que nos mantiene atentos a su evolución en la copa y que despierta admiración en cada minuto que pasa, por su complejidad. En boca, tiene gran profundidad, una cereza final que nos transmite la dimensión de su concentración, llena de finura”.

 

Este vino se puede adquirir en la tienda online de Josep Grau al precio de 40 euros la botella de 75 cl.

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