Con motivo de la celebración del Día Mundial de los Océanos el 8 de junio, la firma Blancpain ha organizado una exposición en su boutique de El Corte Inglés de Castellana en la que se pueden ver algunas piezas de sus legendarios modelos de buceo procedentes del museo que la manufactura tiene en Suiza, una ocasión única para ver la forma en que han evolucionado estos instrumentos de precisión con los que los buceadores hacían sus inmersiones a mediados del siglo pasado.
Bajo el lema “El océano: vida y subsistencia” se han organizado una serie de actos que reflejan la importancia de cuidar el entorno marino, un ecosistema que es fundamental para la existencia del ser humano, y no debemos dejar esta tarea a generaciones venideras. Además de un concurso de fotografía en colaboración con Oceanic Global, Blancpain ha organizado diversas actividades en cada país, y en España destaca esta exposición en la boutique de Madrid donde se pueden ver piezas de gran valor, como un Fifty Fathoms de los años 50 y otros modelos que muestran la evolución de los relojes de buceo a lo largo de las últimas décadas, rematando con el modelo más actual, el Blancpain Fifty Fathoms No Rad, una de las pocas unidades que quedan de la edición limitada de 500 para todo el mundo.
El reloj Fifty Fathoms de Blancpain se ha convertido en una leyenda tras más de seis décadas al servicio de buceadores profesionales que lo utilizan como una herramienta de alta precisión en sus inmersiones. Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, los responsables del Cuerpo de Nadadores de Combate de la Marina francesa buscaban un reloj profesional apropiado para las misiones de los militares de buceo para lo que establecieron un listado de condiciones que debería cumplir, como buena legibilidad y estanqueidad para garantizar un buen funcionamiento.
Una corona con doble junta fue una de las soluciones que aplicó Blancpain en los primeros prototipos para asegurar una buena estanqueidad al no estar atornillada y también vieron la necesidad de incorporar un bisel giratorio que facilitase el cronometraje en cada inmersión, añadiendo un mecanismo de bloqueo que fue patentado. Superadas las primeras pruebas, el reloj se convirtió en un componente esencial para esta unidad del ejército francés, y más tarde para otras fuerzas navales.
El nombre de ‘Fifty Fathoms’ se debe a la memoria del canto de Ariel en La Tempestad de Shakespeare: “A cinco brazas profundas yace tu padre, sus huesos hechos coral”, que gustó a Jean-Jacques Fiechter, CEO de Blancpain durante tres décadas, por su referencia a las brazas (fathoms en inglés). Elevó en número a ‘fifty’ (cincuenta) para que evocara la imagen del buceo de profundidad, estableciendo las cincuenta brazas como la profundidad a la que podían llegar los buzos en aquella época.
A lo largo de los años, el Fifty Fathoms ha ido evolucionando para convertirse en un elegante reloj con funciones de buceo, llegando a tener una estanqueidad garantizada hasta los 300 metros de profundidad, y manteniendo todos los elementos necesarios como son la buena legibilidad en la esfera, corona y fondo de la caja roscados, así como un bisel giratorio unidireccional. Más información en www.blancpain.com