En 2015 irrumpía en el escenario motociclista mundial una moto única, la Kawasaki Ninja H2R, que ahora se presenta completamente renovada, pero fiel a su concepto original: “más allá de lo imaginable”. Es un producto muy especial, con un motor que supera los 300 CV de potencia y homologada únicamente para circuito, donde la tecnología adquirida en competición por Kawasaki demuestra un gran rendimiento.

 

Utiliza soluciones tecnológicas que están probadas en otros modelos de la familia Ninja, como el ‘supercharger’ integrado, diseñado y fabricado al 100% por Kawasaki, equipado con una turbina que, a máximas revoluciones, rompe la velocidad del sonido.

 

Aprovecha la potencia del motor de cuatro cilindros con su transmisión inspirada en MotoGP, un chasis multi-tubular diseñado para soportar enormes fuerzas, al tiempo que ofrece la cantidad adecuada de flexión para ofrecer un pilotaje sublime. En la construcción se utilizan tubos de diferentes anchuras y grosores, todos ellos calculados mediante una simulación informática exclusiva de Kawasaki para afinar al máximo las características de tensión y resistencia.

 

Utiliza un basculante de un solo brazo apoyado por una unidad de suspensión trasera Öhlins TTX36, mientras que Brembo proporciona una potencia de frenado ejemplar a través de un par de impresionantes pinzas monobloque delanteras. Cuenta con un embrague hidráulico asistido y anti-rebote y una gama de ayudas electrónicas gestionadas por la IMU de Bosch, como la función de gestión de curvas y el control de tracción, la H2R es capaz de llegar a los límites de las prestaciones, pero siempre teniendo en cuenta la seguridad.

Visualmente, la única palabra que viene a la mente es ‘intimidante’. Un aspecto frontal que se parece más a un avión que a una motocicleta y tiene el logo Kawasaki River Mark como punto focal; un logotipo que encarna el espíritu de excelencia de Kawasaki. A altas velocidades se crea una enorme carga aerodinámica para mantener el neumático delantero pegado a la pista gracias a las alas de carbono en el carenado. Mientras tanto, el piloto disfruta de una posición de conducción ergonómica desarrollada en el túnel de viento y ayudada por un asiento con almohadillas laterales de apoyo ajustables hacia delante y hacia atrás.

No hay gráficos destacados en la Ninja H2R, ni signos externos del increíble potencial que se encuentra dentro. En 2022, la oportunidad de poseer la motocicleta producida en serie más poderosa del mundo y la Ninja definitiva sigue siendo una de las grandes ambiciones para los pilotos más exigentes.

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