Continúa el camino iniciado con la ‘El Solitario Impostor’ que supuso una ruptura con una estética muy particular, y parece que sus creaciones han perdido ese aire de motocicleta que debías montar portando contigo un juego de herramientas, siempre con el temor a que se te vaya a desmontar. También han desparecido las peculiares decoraciones consistentes en palabras pintadas sobre la moto con la poco sublime técnica del brochazo -asistí a más de un evento que contaba con un stand suyo en el que se pudo escuchar a la gente murmurando que El Solitario es el rey del Typex-.
Eso se acabó, afortunadamente, porque ahora podemos contemplar la obra de un constructor que desarrolla su talento para hacer motos mucho más interesantes y desde luego meritorias.
El contexto filosófico que palpamos ahora en su obra toma un cariz resultante de fundir un buen trabajo con unos pensamientos y obsesiones inherentes a cualquier ser humano, el propio El Solitario confiesa su intención con la MALO/BUENO de encarnar la dualidad paradójica presente en la naturaleza humana, pero cuidando la distancia entre sus dos vertientes más antagónicas, lo bueno y lo malo, anidando ambos lados en la misma persona, las serpientes ocultas bajo la piel de cordero. Hasta la persona aparentemente más bondadosa es capaz de desarrollar la maldad, los más intensos en la luz pueden serlo en la oscuridad.
El Solitario se declara enemigo de los ángeles de interior podrido y pide estar cerca de los lobos de mirada feroz que guardan las distancias, los de aspecto fiero, pero esos que si logras ganártelos pueden ser hasta peluches... ¿y quién no los prefiere?
Aquí tenemos a la criatura nacida para ser una de esos lobos, pero el tiempo dirá si verdaderamente es así.
Con todo este cuadro de intenciones queda claro que lo peor que le puede pasar a una moto de El Solitario es que genere indiferencia, seguramente son las motos más provocadoras que se ven últimamente, construidas bajo conceptos extremos y, por tanto, las opiniones sobre ellas están totalmente polarizadas. Imagino a gente adorando sus motos al mismo tiempo que otros las detestan y mientras intuyo a El Solitario esbozando una sonrisa por ello.
Últimamente pone mucho interés en dejar claro que sus motos están concebidas para provocar sensaciones y desde luego para hacer kilómetros, declara que la MALO/BUENO está pensada para ser fiable y tener mínimos problemas de ergonomía, bajo su cuerpo de aspecto medieval y asesino hay una Harley Davidson que te llevará a todas partes.
Estas son las principales transformaciones:
- Cuerpo de la moto hecho a mano: Máscara frontal, Tanque de combustible, la sección trasera.
- Neumáticos Bridgestone Spitfire
- Controles ISR
- Faros Baja Designs
- Piloto trasero LED
- Instrumentación Motogadget
- Colas Screaming Eagle modificadas
- Trabajo de cuero de River Union en asiento y manillar
¿El precio?, sólo lo sabrás si te pones en contacto con El Solitario.
José Ángel – www.super7moto.com