Las pulseras de actividad se están convirtiendo en un complemento habitual para controlar la cantidad de ejercicio que hacemos a lo largo del día y cada vez añaden más funciones prácticas. La última en llegar es la Garmin vivosmart HR, que como principal novedad incorpora un pulsómetro para que el usuario pueda controlar la frecuencia cardiaca directamente en su muñeca sin necesidad de otros accesorios.
El diseño exterior también se ha renovado con un aspecto más moderno y una pantalla que ahora se lee mejor cuando le da la luz del sol directamente, además de incorporar una elegante correa con cierre de hebilla.
Es un magnífico asistente en la actividad diaria que puede controlar el pulso, los pasos, las calorías y la distancia, pero ahora también los pisos subidos gracias a un altímetro barométrico. Con la prestación ‘minutos más activos’ podemos cuantificar la intensidad de cada actividad y cuantificar el progreso en base a los objetivos recomendados. Y lanza alertas en forma de vibración cuando se produce una hora de inactividad.
Mantiene al usuario al tanto de lo que sucede en su móvil y avisa cuando ha entrado un mensaje de texto, un correo electrónico y vibra cuando recibe una llamada telefónica, mostrando en la pantalla toda la información.
En el ‘modo sueño’ analiza las horas reales que se duerme, los periodos de movimiento y los de descanso, almacenando los datos en la memoria durante un año. Compatible con sistemas operativos iOS y Android 4.3 mediante conexión bluetooth, es sumergible hasta una profundidad de 50 metros, cuenta con una autonomía de hasta cinco días, se comercializa en tres colores –negro, azul y morado- y tiene un precio recomendado de 149 euros.