Acaba de abrir sus puertas el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra y ya tenemos las primeras novedades. Empezaremos por uno de los coches más espectaculares, tanto por su estética como por las cifras que le acompañan, todo superlativo, hasta el precio, pues el Bugatti Chiron costará 2,4 millones de euros (más impuestos) cuando salga a la venta en otoño de 2016 y estará reservado únicamente a 500 unidades en edición limitada.
El sustituto del Veyron no defrauda con las espectaculares líneas de su carrocería y en su interior oculta una avanzada tecnología con la que la marca francesa integrada en el grupo Volkswagen tiene intención de afrontar un nuevo récord de velocidad. Para ello cuenta con un motor W16 de 8.0 litros con cuatro turbos que entrega una potencia máxima de 1.500 CV (1.103 kW) a 6.700 rpm y un par máximo de 1.600 Nm entre 2.000 y 6.000 rpm, cifras demoledoras que permiten una velocidad máxima de 420 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en sólo 2,5 segundos. Utiliza un cambio de doble embrague de 7 velocidades, neumáticos de bajo perfil (285/30 R20 en el eje delantero y 355/25 R21 en el eje trasero), logrando un peso final de 1.995 kilos.
Los diseñadores de Bugatti han realizado un gran trabajo con las líneas del Chiron que deja antiguo al Veyron. Han empleado fibra de carbono para lograr una carrocería ligera y han dotado a este superdeportivo de un chasis adaptativo con cinco programas de funcionamiento que actúan sobre la suspensión, dirección, tracción y también modifica los elementos aerodinámicos y el comportamiento del control de estabilidad.
El Bugatti Chiron es un complejo proyecto en el que la firma francesa ha dedicado muchos recursos. Según afirman sus responsables, ha completado más de 300 horas en el túnel del viento para mejorar el rendimiento aerodinámico y se han realizado pruebas a lo largo de 500.000 kilómetros hasta su puesta a punto final.
Mide 4,54 metros de longitud, 2,04 metros de ancho y la distancia entre ejes es de 2,71 metros. En el frontal lleva la conocida parrilla, enormes entradas de aire y unos nuevos grupos ópticos LED compuestos por cuatro unidades que identifican su afilada silueta. En la trasera, debajo del enorme alerón con función de aerofreno hay una barra de luces LED que mide 1,6 metros, ocupando prácticamente todo el ancho del coche.
Para el interior se ha creado un espacio dedicado a la conducción en el que no hay concesiones a los detalles superfluos, pero todo está ejecutado con una calidad impresionante a base de fibra de carbono, cuero y aluminio. Tras el volante de cuero beige con el logo de Bugatti en el centro, llama la atención el velocímetro analógico situado en el centro del cuadro de mandos, con una escala que llega hasta los 500 km/h. A la derecha va una pequeña pantalla LED con la información del navegador y a la izquierda el cuentavueltas, nivel del combustible y temperatura del motor.
Entre sus exclusivos detalles está un juego de maletas creadas a medida para adaptarse a las reducidas dimensiones del maletero frontal.  
Compartir en:

VidaPremium te recomenienda

Recibe

Cada semana en tu correo

Quiero mi Newsletter

Lo más leído hoy