El principio es tan sencillo como innegable: cuanto más tiempo pasamos al volante, más probable es que tengamos un accidente. En un mes como agosto, en el que la DGT prevé 43,2 millones de desplazamientos, los factores de riesgo se acumulan y las posibilidades aumentan. Es por ello que los períodos vacacionales exigen la máxima precaución a la hora de planificar y realizar nuestros desplazamientos, contando de antemano con que las cifras de siniestralidad son más altas en vacaciones que en cualquier otra época del año.
Según datos que se desprenden del informe de siniestralidad que acaba de presentar el Grupo Next, los meses en los que los españoles conducimos más nuestros vehículos coinciden con los periodos vacacionales más largos de nuestro calendario; son diciembre y agosto, con un incremento en el número de kilómetros recorridos por cada conductor de un 44,4 y un 36,6 por ciento respectivamente.
Si cruzamos estos datos con los de accidentes con víctimas que nos facilita la Dirección General de Tráfico, podemos observar como en el último año completo indexado (2013) fallecieron una media de 140 personas cada mes en las carreteras españolas. Estos datos se reparten de manera desigual a lo largo del año, oscilando entre los105 fallecidos de mayo y los 171 de agosto. Agosto tiene también el dudoso honor de ser además el mes que nos deja con más heridos graves (370).
Los meses de verano son los más catastróficos desde el punto de vista de siniestralidad. En concreto, son los que más víctimas mortales registran, con 163 fallecidos en julio y 171 en agosto. La suma de estas dos cantidades nos informa de que casi el 20 por ciento de los fallecidos en las carreteras españolas a lo largo de un año se concentra en estos dos meses.
Además del ya reseñado aumento de los kilómetros recorridos entre los conductores españoles, hay otros factores que entran en juego en el aumento de la siniestralidad en los meses de verano. En concreto nos detendremos en dos. Por un lado, es necesario recordar que en España son válidos todos los permisos de conducción expedidos en cualquier país de la UE y también, con carácter temporal, los permisos de residentes de otros países que nos visitan.
Esta situación ocasiona que en periodos vacacionales no sólo aumente el número de kilómetros que recorre cada conductor, sino que el número total de conductores y vehículos circulantes se incremente considerablemente en nuestras carreteras. En este sentido, la Dirección General de Tráfico estima que 20 millones de vehículos con matrícula extranjera visitan España a lo largo de un año, la mayoría de los mismos, coincidiendo con las vacaciones estivales.
Por otro laso, es necesario tener en cuenta también la letalidad en los accidentes de tráfico con víctimas, cuya media en 2013 fue de 1,3; y en la que los meses con mayor letalidad fueron agosto, con 1,7, y febrero y septiembre, con 1,5. El incremento de esa letalidad en agosto puede estar relacionado, sobre todo, con el mayor uso de ciclomotores y motocicletas –vehículos con una tasa de mortalidad mayor que el turismo– registrado en los meses de verano.
No en vano, y atendiendo de nuevo a datos facilitados por la DGT, los meses con mayor número de fallecidos entre los conductores de ciclomotor durante el último año registrado han sido julio y agosto; y en relación a las motocicletas, a lo largo del período comprendido entre mayo y agosto se alcanzó o superó siempre la cifra de30 fallecidos mensuales.