En un caso de éxito para la visión de la electromovilidad de Hyundai Motor, tres modelos de Kona Eléctrico establecieron un récord de autonomía de vehículos eléctricos para la compañía. El desafío consistía en que con una sola carga de batería, cada coche debería ser capaz de recorrer más de 1.000 kilómetros. Los SUV totalmente eléctricos superaron con facilidad la prueba, también conocida como ‘hypermiling’, y se quedaron sin batería tras haber recorrido 1.018,7, 1.024,1 y 1.026,0 kilómetros respectivamente. En relación con la capacidad de la batería de 64 kWh, cada valor individual representa otro récord, ya que el consumo de energía de los automóviles de 6,28, 6,25 y 6,24 kWh/100 km fue muy inferior al valor estándar de 14,7 kWh/100 km determinado por el WLTP.
Todos los Kona Eléctricos fueron cogidos directamente de la cadena de producción, es decir, eran totalmente de serie sin ninguna modificación. Además, los tres SUV urbanos de 150 kW/204 CV fueron conducidos por conductores que se fueron turnando durante el recorrido de tres días, y los sistemas de asistencia de los vehículos permanecieron intactos. Estos dos factores son también requisitos importantes para la importancia del objetivo de autonomía de Hyundai. Dekra, la organización experta que ha estado operando el Lausitzring desde 2017, se aseguró de que todo saliera según lo previsto durante el exitoso experimento de récord de rendimiento. Los ingenieros de Dekra supervisaron los vehículos utilizados y llevaron a cabo un registro de cada uno de los 36 cambios de conductor.
El reto de conducir ahorrando energía
Dado que ningún otro fabricante de marcas de gran volumen ha realizado nunca una prueba tan práctica, las estimaciones preliminares fueron prudentes. Los técnicos de Hyundai que trabajaban con Thilo Klemm, Jefe del Centro de Capacitación Post-Venta, habían calculado un rango teórico de entre 984 y 1.066 kilómetros para una conducción simulada a la velocidad media del tráfico del centro de la ciudad. Esto era un desafío para los equipos, porque conducir de manera eficiente requería concentración y paciencia en el periodo estival.
En el circuito de Lausitz se enfrentaron tres equipos: uno de pilotos de pruebas de la renombrada revista especializada Auto Bild, uno con técnicos del departamento de postventa de Hyundai Motor Deutschland y otro con miembros de la oficina de prensa y del departamento de marketing de producto de la empresa. Aunque el uso del aire acondicionado no estaba prohibido, ninguno de los equipos quería correr el riesgo de que una conducción con aire acondicionado con una temperatura exterior de hasta 29 grados centígrados pudiera afectar a los kilómetros de autonomía. Por la misma razón, el sistema de entretenimiento del Kona Eléctrico permaneció apagado durante todo el tiempo, y la energía disponible se utilizó únicamente para la propulsión. Sólo la luz de conducción diurna permaneció encendida, a fin de cumplir los requisitos legales para el tráfico rodado. Como neumáticos se utilizaron los neumáticos estándar Nexen Nfera SU1 de baja resistencia a la rodadura en el tamaño 215/55R17.
La velocidad media de los equipos después de la distancia de más de 1.000 kilómetros era de entre 29 y 31 km/h. Aunque a primera vista esto pueda parecer lento, tuvo que lograrse en las condiciones típicas del tráfico en el centro de la ciudad, incluidas las horas punta y los cambios de semáforo, así como en las zonas de 30 km/h de las zonas residenciales. “Con esta prueba, el Kona Eléctrico demostró su potencial como un SUV eficiente y respetuoso con el medio ambiente”, explicó Jürgen Keller, Director General de Hyundai Motor Deutschland GmbH. “Esto demuestra su idoneidad para el uso diario y muestra que, cuando se trata de nuestros vehículos eléctricos, la preocupación por la autonomía debería ser cosa del pasado”.
Un indicador de nivel de carga extremadamente fiable
La noche anterior a los recorridos, las condiciones de los tres modelos Kona Eléctrico fueron comprobadas y pesadas por los ingenieros de Dekra. Además, los expertos compararon los cuentakilómetros y sellaron la interfaz de los diagnósticos de a bordo, así como la tapa de seguridad bajo el salpicadero y sobre la tapa de carga del parachoques delantero, para descartar cualquier manipulación del resultado. Entonces comenzó el viaje de casi 35 horas. La flota eléctrica de Hyundai condujo cautelosamente. Las cosas se iban animando durante los cambios de conductor, en los cuales se debatían temas como los ajustes del control de crucero, la pantalla de consumo de combustible actual del ordenador de a bordo y la forma más eficiente de acercarse a las curvas cerradas del tri-oval de 3,2 kilómetros de longitud.
Otro hallazgo importante durante la prueba fue que el indicador de nivel de carga del Hyundai Kona Eléctrico es muy fiable y cuenta los porcentajes según el estilo de conducción. A partir del cero por ciento, el coche sigue conduciendo durante varios cientos de metros, luego sigue sin energía y finalmente se detiene con un pequeño tirón porque el freno de estacionamiento eléctrico se activa por razones de seguridad.