Klipsch Heresy IV: el renacer de una leyenda

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Un clásico del audio de alta fidelidad renace con mejoras técnicas clave, un diseño artesanal impecable y un sonido potente que combina graves profundos, medios definidos y agudos cristalinos en un formato compacto.

Fabricado por primera vez en 1957, el Klipsch Heresy fue concebido como un altavoz de tres vías y canal central para complementar al legendario Klipschorn en configuraciones estéreo. Hoy, más de seis décadas después, el Heresy IV se reinventa sin perder su esencia. Con una apariencia retro refinada y tecnologías acústicas de última generación, se presenta como una pieza de alto rendimiento pensada para llenar de vida vinilos, cine en casa y cualquier fuente sonora con la que se le ponga a prueba.

Entre las novedades más relevantes se encuentra, por primera vez en la historia del modelo, un puerto bass réflex trasero, lo que permite una mejora significativa en la extensión de las frecuencias bajas, concretamente en torno a 10 Hz adicionales, según el fabricante. Este puerto incorpora la geometría Tractrix, que facilita una transferencia de aire más eficiente y silenciosa, además de surcos internos que reducen la turbulencia. El resultado: unos graves más limpios, controlados y contundentes.

El diseño acústico no se queda atrás. El Heresy IV está equipado con un motor de compresión de rango medio K-702, que utiliza un diafragma de poliamida para una mayor fidelidad en la reproducción, acoplado a una bocina K-704 Tractrix. En la parte superior del espectro sonoro, se incorpora un tweeter K-107-TI de titanio, junto con un difusor de fase de alta dispersión, que garantizan una cobertura amplia y homogénea en las frecuencias altas.

Cada unidad es diseñada y ensamblada a mano en Hope, Arkansas, una tradición que la marca estadounidense ha mantenido desde sus orígenes. Este proceso artesanal asegura una construcción robusta y duradera, pensada para ofrecer un sonido dinámico, preciso y con mínima distorsión. Además, sus bornes de conexión, chapados en oro, están preparados para biamplificación y garantizan una óptima transferencia de señal.

Desde el punto de vista estético, el Heresy IV se ofrece en cuatro acabados de madera natural: cerezo, roble envejecido, nogal americano y fresno negro satinado. Incluye una base vertical inclinada para su colocación directa en el suelo, aunque también puede retirarse para instalaciones personalizadas en recintos.

Este altavoz se comercializa bajo pedido, con un tiempo estimado de fabricación de ocho semanas, está disponible en España a través de la empresa especializada Magnetrón, y el precio de venta es de 4.998 euros la pareja.

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