Kia Stinger
05 de octubre de 2017 NovedadesIrrumpe con fuerza en el segmento GT con una esbelta carrocería de 4,83 m, motores de 200 a 370 CV y un comportamiento muy deportivo.
El nuevo Gran Turismo coreano es un vehículo que teníamos muchas ganas de probar desde que en enero se adelantaran algunos de sus detalles en el Salón de Detroit y después de haberlo visto en ‘estático’ en diversas ocasiones. Ahora ha llegado el momento y hemos viajado hasta la isla de Mallorca para probarlo a fondo en entornos muy diferentes, incluso con una prueba en circuito y después por las bellas y retorcidas carreteras de la isla, donde ha demostrado su gran preparación y puesta a punto.
Diseñado bajo la supervisión de Peter Schreyer, Diseñador Jefe de Kia Motors y Gregory Guillaume, Diseñador Jefe de Kia Motors Europa, partiendo del GT Concept presentado en 2011, el Kia Stinger es un moderno Gran Turismo que cumple con los principales requisitos de este tipo de vehículos –voladizo delantero corto, capó alargado, parabrisas tendido- y una línea lateral que se alarga desde el pilar central hasta el portón del maletero en una suave caída, dejando un amplio espacio en el interior en una cómoda carrocería de cinco puertas.
Es un coche concebido para realizar largos viajes y disfrutar de la carretera. Mide 4,83 metros de longitud, 1,87 de ancho y 1,40 de alto, con una generosa distancia entre ejes de 2,90 metros para asentarse muy bien sobre el asfalto. Asientos cómodos delante con una magnífica sujeción lateral, posición de conducción baja y un puesto de mandos ergonómico se suman a un conjunto en el que la mecánica también está a la altura con tres motorizaciones –dos gasolina de 255 y 370 CV, y un diesel de 200 CV- y un chasis que ha sido afinado para ofrecer un tacto deportivo, aunque con la posibilidad de usarlo a diario con total comodidad.
El frontal del coche es lo más llamativo con la parrilla ‘tiger nose’ característica de Kia, faros LED de iluminación diurna, entradas de aire laterales y una gran rejilla de refrigeración inferior. La línea lateral resulta atractiva al ser muy afilada y llevar los pasos de rueda muy marcados, así como las salidas de aire laterales, que dan un toque más deportivo. La zaga tiene un diseño sencillo, pero es agradable a la vista por las proporciones equilibradas, los faros LED y el deflector trasero que canaliza el aire, dejando espacio para las salidas de escape.
A pesar de que es un coche bajo -1,40 metros-, el acceso a las plazas delanteras es cómodo y en el interior encontramos un salpicadero elevado con toques deportivos y otros que recuerdan al mundo aeronáutico, como las salidas de aire circulares. En el centro del salpicadero lleva una pantalla multifunción de 8” que parece una tablet y también hay otra pantalla de 7” entre los dos relojes del cuadro de instrumentos que ofrece toda la información del ordenador de viaje, con numerosos datos de interés, como el consumo, cronómetro para medir tiempos en circuito, y hasta un indicador de las fuerzas G. Todos los instrumentos están enfocados hacia el conductor y tienen un manejo fácil, con materiales de calidad –piel y aluminio-, buenos ajustes y un volante con un tamaño más grueso que cuenta con botones para el manejo del audio, teléfono, ordenador de viaje y control de crucero.
De la parte mecánica se ocupan tres modernos motores turboalimentados que encajan a la perfección con la filosofía del coche. El que más nos ha gustado es el gasolina 2.0 T-GDI de 255 CV a 6.200 rpm y 353 Nm de par máximo porque es una opción razonable en todos los sentidos: tiene fuerza suficiente para mover el coche con rapidez, divertido en curvas al ser tracción trasera, tiene un sonido agradable para ser un cuatro cilindros y el consumo resulta bastante razonable (7,9 litros en ciclo mixto). En Kia están convencidos de que el más vendido en Europa será el 2.0 CRDI, un turbodiésel que entrega 200 CV a 3.800 rpm con un par máximo de 440 Nm y un consumo medio homologado de de 5,6 litros en tracción trasera y 6,5 litros si lleva la tracción total. No es ruidoso, tiene buen empuje y gasta poco, pero no es tan fino como uno de gasolina.
El más deseado será el 3.3 T-GDi, un motor V6 biturbo con 370 CV a 6.000 rpm y un par máximo de 510 Nm entre 1.300 y 4.500 rpm. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y alcanza los 270 km/h de velocidad punta. Ha sido puesto a punto en el exigente circuito de Nürburgring (Alemania) por Albert Biermann, Director de Vehículos de Altas Prestaciones de Kia y va asociado a un sistema de tracción integral que entrega el par inicialmente al tren trasero, y puede llegar a transferir hasta un 40% al tren delantero en caso de pérdida de adherencia.
Todos los motores van unidos a una nueva caja de cambios automática de 8 velocidades de desarrollo propio con manejo secuencial a través de una corta palanca que hay en el túnel central en posición elevada o desde las levas en el volante, muy cómodas y de tacto muy agradable. Además, el conductor puede elegir entre cinco modos a través de un selector (SMART, ECO, Comfort, Sport y Sport+). El modo SMART es adaptativo, y funciona muy bien en circunstancias cambiantes. En ECO se da prioridad al ahorro de combustible y los modos deportivos exprimen el máximo del motor, con el Sport+ destinado a circuitos, donde desaparece el control de estabilidad y se ofrece una conducción más pura destinada a los pilotos más expertos.
Gracias a los ajustes en el bastidor y en las suspensiones –McPherson delante y multibrazo detrás- se ha conseguido un buen compromiso deportividad/comodidad que hacen del Stinger un coche utilizable a diario. La insonorización del habitáculo está bastante lograda y la aerodinámica es buena, incluso a altas velocidades. Lo hemos probado tanto en autovías y carreteras de curvas como en un circuito, donde dimos unas vueltas a un ritmo alegre para comprobar el agarre en condiciones seguras.
Y, por último, los detalles para el mercado español. Estará a la venta en noviembre con precios que van desde los 37.900 a 54.150 euros, cuatro niveles de acabado –Style, xTreme, GT Line y GT-, 9 colores de carrocería y cuatro tipos de piel en los interiores. En cuanto al equipamiento, desde la versión más básica viene con cambio automático de 8 velocidades y un completo paquete de medidas de seguridad que incluye Sistema de Gestión de Estabilidad del Vehículo (VSM), aviso de colisión frontal y frenada de emergencia autónoma con detección de peatones, sistema de asistencia de mantenimiento en el carril, alerta de tráfico cruzado trasero y asistente de luces de carretera.
Los precios son realmente competitivos, ya que el Stinger más potente y completo, el 3.3 V6 T-GDi sale por 54.150 euros y un BMW Serie 4 Gran Coupe 440 xDrive con 326 CV y tracción total sale por 61.700 euros, y lo mismo sucede con el Audi S5 Sportback de 354 CV y tracción quattro por 78.060 euros. Y no olviden un último detalle, el Stinger tiene una garantía de 7 años o 150.000 kilómetros.
A la venta desde el mes de noviembre, los precios del nuevo Kia Stinger son los siguientes:
2.2 CRDi Style 200 CV: 37.900 euros
2.0 T-GDi Style 255 CV: 38.900 euros
2.2 CRDi xTreme 200 CV: 41.650 euros
2.0 T-GDi xTreme 255 CV: 42.650 euros
2.2 CRDi xTreme 4x4 200 CV: 43.650 euros
2.2 CRDi GT Line 200 CV: 47.150 euros
2.0 T-GDi GT Line 255 CV: 48.150 euros
2.2 CRDi GT Line 4X4 200 CV: 49.150 euros
3.3 T-GDi GT 4X4 370 CV: 54.150 euros
José A. Prados (Palma de Mallorca) – www.vidapremium.com