Los melómanos y aficionados exigentes ya saben de las cualidades de los auriculares Sennheiser HD800, un modelo que ahora se renueva manteniendo sus características más destacadas y añade una serie de avances técnicos para obtener un increíble sonido con la sensación de espacialidad en el envoltorio más lujoso del mercado.
Se trata de una experiencia sonora que mejora la acústica en frecuencias medias y bajas mediante la técnica de absorción -utilizada por primera vez en el modelo IE 800- que se encarga de eliminar el efecto psicoacústico de enmascaramiento de frecuencia, puesto que el oído humano no es capaz de escuchar los tonos por encima de una frecuencia dada con mayor nivel. Al absorber estas frecuencias resonantes, se previene la aparición de picos no deseados y permite la audición de todos los tonos.
Otra novedad es la incorporación de un cable balanceado con XLR4 para conectar con el amplificador HDVD800 y el cable original acabado en un conector jack de 6,3 milímetros. También vienen con una memoria USB que incluye la respuesta en frecuencia personalizada y el manual de usuario en PDF para consultar todas las dudas.
Bajo la carcasa acabada en color negro mate, los auriculares HD 800S alojan unos transductores dinámicos Duofol de 56 milímetros de diámetro -un tamaño superior al habitual- con la mejor definición para tonos graves, y para las frecuencias agudas, el fabricante ha diseñado un diafragma especial que garantiza la reproducción del sonido sin interferencias. La respuesta de frecuencia va de 6 a 51.000 Hz y lleva un sistema exclusivo para el montaje de las cápsulas que dirigen las ondas sonoras al oído formando un ligero ángulo de 45º que se encarga de arrojar una vibración que simula el efecto espacial que se produce al escuchar audio en unos altavoces.
Están fabricados con materiales de primera calidad y acabados inigualables que contribuyen a mejorar la calidad acústica. Un buen ejemplo es la malla de acero inoxidable del transductor, que se encarga de garantizar que el sonido no se vea afectado por molestas vibraciones o distorsiones, o las cápsulas que rodean el oído, fabricadas en un plástico que utiliza la industria aeronáutica con la finalidad de atenuar el sonido ambiente, además de unas almohadillas japonesas de Alcantara que aportan suavidad y son fáciles de limpiar.
Los cables han sido fabricados con cuatro hilos de cobre bañado en plata y aislados con teflón para protegerlos de las perturbaciones electromagnéticas, mientras que los adaptadores de audio -alta precisión y jack de 6,3 mm- se presentan chapados en oro para un óptimo contacto. El precio de venta recomendado es de 1.598 euros.