El Volkswagen ID3 de 2024 tiene casi todas las mejoras que los usuarios demandaban en el modelo de 2020. Hay retoques de carrocería, capó y paragolpes con los que mejora su aspecto exterior. Por dentro resulta ahora más confortable y elegante, cuenta con materiales de mejor calidad que los de su antecesor y, sobre todo, con una autonomía de 559 kilómetros (WLTP) que lo hace más apto para desplazamientos largos, gracias a su nueva batería de 82 kWh (77 kWh útiles), asociado a un motor de 204 CV. Eso sí, su precio de venta parte 43.435 €, aunque con todas las ayudas y descuentos posibles se puede quedar en unos 36.000€.
En 2024, el mercado de modelos eléctricos estará superpoblado en cuanto a turismos de similar potencia que el nuevo ID3, que tiene competidores con precios por abajo y por arriba. Entre los principales rivales se mencionan: el Cupra Born e-Boost-Pack de 231 CV (43.200€); el Renault Mégane E-Tech EV60 de 220 CV (43.200€); el Nissan Ariya Encage de 218 CV (47.700€); el smart 3 Premium de 272 CV (47.400€); el Ssangyong Korando e-motion Limited de 190 CV (40.900€); el Peugeot e-3008 de 213 CV (46.660€); el Honda e:Ny1 Elegance de 204 CV (52.400€); y el Volvo C-40 Recharge Single+ de 238 CV (52.358€).
Respuesta inmediata al acelerador
El motor eléctrico no funciona con caja de cambios asociada ni embrague, porque todo el funcionamiento parte del propio propulsor y la repuesta a la aceleración es inmediata, llega a los 100 km/h sin pestañar en 7,9 segundos. La sensación de velocidad es mínima, por lo que hay que estar muy atento a no sobrepasarse repentinamente en carreteras de un máximo de 90 km/h y muy vigiladas.
Como todos los coches eléctricos, el de esta prueba tiene un sistema para ahorrar batería en las deceleraciones, tanto al levantar el pie del acelerador como al pisar el freno. Para esas acciones, el cuadro de instrumentos indica carga de energía o gasto cuando se vuelve a acelerar. En cuanto a consumo es más que aceptable. El registro medio oficial es de 15,3 kWh por cada 100 km, pero como es lógico depende de muchos condicionantes (peso, carretera, velocidad, aceleraciones innecesarias…).
Autonomía para viajes más largos
En ciudad hemos gastado una media de unos 17 kWh, con lo que se puede conseguir una autonomía de unos 453 km, pero en autovía con dos ocupantes y algo de carga se redujo a unos 340 km. Es decir, aún no es muy apto para un desplazamiento Madrid-Alicante por ejemplo, entre otras cosas porque en los puntos públicos de recarga del trayecto no siempre se encuentra máquinas de suministro desocupadas, aunque uno tenga reserva. Y tampoco esperan muchos minutos más de la hora que uno se ha propuesto llegar y recargar.
No obstante hay un claro avance en cuanto a autonomía, con esta nueva batería de 82 kWh (capacidad útil 77 kWh) que tiene la versión Pro S que hemos probado (hay disponible otra versión iD3 pro con batería de 58 kWh y unos 6.000€ más económica).
A la hora de viajar se agradece que pueda cargar en puntos rápidos hasta 170 kW en corriente continua, por lo que en 30 minutos puede pasar del 10 al 80% de la capacidad, mientras que si lo hacemos en casa la potencia máxima es de 11 kW, empleando 7,5 horas.
Estabilidad incuestionable
Por otra parte, el comportamiento dinámico es bueno, en este aspecto nada diferente a su predecesor. Las suspensiones siguen siendo firmes, pero nada incómodas, a pesar de que esta unidad cuenta con ruedas de 20 pulgadas y neumáticos de perfil bajo. La estabilidad sigue siendo incuestionable, debido a las proporciones del chasis, a la batalla prolongada y al centro de gravedad bajo. Por todo ello tiene un funcionamiento suave y silencioso. Además resulta muy maniobrable a baja velocidad en ciudad y en aparcamientos, porque su diámetro de giro (de 10,2 metros) es más reducido que el de otros eléctricos de igual longitud.
La dirección es precisa, pese a que se muestra algo dócil en carretera y sólo es más firme al conducir por encima de 100 km/h. Tampoco es rápida porque necesita 3,5 vueltas de volante para girar las ruedas delanteras entre topes, en esto es similar a la de los SUV, que invita a una conducción más tranquila y relajada, que no decimos lenta, sino mucho más segura, con el tiempo justo para comprobar en movimiento el terreno o asfalto y sus posibles irregularidades.
Interior muy mejorado
Los cambios en el interior han mejorado su aspecto y ahora más acorde a lo que se paga por este modelo. Lo más significativo son los nuevos materiales del salpicadero, ahora más blandos y con mejores ajustes, que mejoran aún más la insonorización. Antes eran duros y poco vistosos. La pantalla central multifunción es ahora de 12 pulgadas (antes de 10”) que incluye el equipo multimedia mejorado de Volkswagen y estrena el nuevo sistema operativo 3.5, así como los nuevos sistemas de ayuda a la conducción. Los mandos y controles son los mismos que los del iD3 anterior (la marca dice que los cambiará más adelante), por lo que resulta algo difícil su utilización, sobre todo para los que no nacimos en la era digital.
Otro cambio interior interesante es el recubrimiento de las puertas, que ahora son ligeramente acolchadas y aumentan la elegancia. Los asientos estrenan tapizado (tipo alcántara) y tienen aspecto algo deportivo por su pronunciada sujeción lateral, pero también tienen mullido cómodo y base alargada, como para que quede toda la pierna bien apoyada y así retrasar el cansancio en los desplazamientos largos.
El habitáculo tiene las mismas cotas que el iD3 de generación anterior. Resulta confortable para cuatro ocupantes adultos. La fila trasera como es habitual en la mayoría de los turismos tiene homologada tres plazas, pero en este caso solo dos son asientos verdaderos, anchos y confortables. El central es muy estrecho y duro que, aunque cuenta con cinturón y reposacabezas, sólo es válido para una emergencia y para utilizarlo en trayectos muy cortos, porque ni siquiera un niño de poca estatura puede ir cómodo. Por otra parte cuenta con buen espacio longitudinal para las piernas en las plazas traseras, mejor que en muchos modelos de la categoría. El maletero, con un volumen de 385 litros está en la media del segmento, pero entre los turismos eléctricos está entre los de mayor capacidad.
Dotación de serie más completa
El equipamiento de serie es más completo, que por su precio no puede ser de otra manera. En cuanto a seguridad, además de todos los sistemas que ya son habituales en los coches modernos y obligatorios en algunos, destacan sin sobreprecio las alertas de cambio involuntario de carril, la de colisión y frenada de emergencia, la de fatiga del conductor y la acústica de alerta a los peatones. Destacan también el asistente de luz de carretera, el aviso de cinturón no colocado, el servofreno de emergencia, la ayuda del aparcamiento delantero y trasero, el limitador de velocidad y los faros LED.
La dotación de serie continúa con los sistemas de ayuda a la conducción, confort y multimedia. Entre ellos se mencionan: el reconocimiento de señales de tráfico; retrovisores exteriores con calefacción; selección del perfil de conducción; arranque sin llave; asientos delanteros con calefacción, función de memoria y masaje; eyectores de lavaparabrisas con calefacción; climatizador Climatronic de dos zonas; luces automáticas; iluminación ambiental de 10 colores; parabrisas con aislamiento térmico y acústico; volante de cuero; maletero con iluminación; conexión Bluetooth para móvil; preinstalación para navegador Discovey Pro; control por voz; radio Ready 2 Discover Max; servicios online; tornillos antirrobo; y cable de carga modo 3 tipo 2 (32 A), entre los más importantes.
Ficha técnica:
Volkswagen ID.3 Pro S 150 kW (204 CV) 77 kWh
Dimensiones
Longitud: 4.264 mm
Anchura: 1.809 mm
Altura: 1.564 mm
Batalla: 2.770 mm
Peso: 1.933 kg.
Plazas: 5 (2+3)
Maletero: 385 litros
Motor eléctrico
Potencia máxima: 204 CV (150 kW)
Par máximo: 310 Nm
Batería
Tipo: acumulador de iones de litio
Capacidad: 82 kWh (útil 77 kWh)
Potencia máxima carga CC: 170 kW
Potencia máxima carga CA: 11 kW
Transmisión
Tracción: trasera
Cambio: automático
Prestaciones
Velocidad máxima: 160 km/h
Aceleración de 0 a 100 km/h: en 7,9 s
Consumo combinado WLTP: 15,3 kWh/100 km
Emisiones CO2 WLTP: 0 gramos/km
Autonomía eléctrica WLTP: 559 km
Etiqueta medioambiental DGT: ‘0 emisiones’
Normativa de emisiones: Euro 6 AP
Precio: desde 43.435 € (Pro S)